━ ¡Tsukasa!━ Exclamó _______ al subir al autobús, se acercó a su asiento colocándose al lado de él con una sonrisa y una mirada extrañada por parte del azabache.━ ¿No es genial que me hayan dejado venir con tu grupo al día de excursión?
━ ¿Te dejaron?━ Preguntó confundido por ver ahí a la castaña de puntas claras.
━ Sí, cuando les conté que me había perdido el autobús, me permitieron venir con el próximo grupo. Y acabo de enterarme que es el tuyo. ¿No es maravilloso? Podre disfrutar mi experiencia contigo.━ Expresó tomando el brazo del chico con entusiasmo.
Tsukasa la observó unos segundos para después sonreír.
━ Claro, será divertido. Más si tú estás ahí.━ Respondió achinando sus ojos en una hipócrita sonrisa, como suele dedicárselas a los demás.
Sin embargo, para la castaña esto fue un detonante de confianza. Era la primera vez que lo veía sonreír en todo éste tiempo de haberlo conocido; y eso la emocionaba de cierta forma.
Esperaba que fuera un buen viaje de principio a fin.
Pero Tsukasa tenía otros planes...
Los planes de Tsukasa no funcionaron, para nada.
Al llegar, trató de mentirle diciendo que iría a comprar una cosas en un puesto cercano, sin embargo, los encargados de cuidarlos no le permitieron hacer eso.
Cuando trató de alejarse de ella para buscar a su hermano, resulta que él no había ido porque se sentía mal y de todas formas tenía que quedarse con la persona con quien se sentó en el autobús.
Cuando entraron al museo, trató de asustarla mintiéndo sobre supuestos hechos verdaderos detrás de algunos cuadros de pintura, esculturas o simplemente cosas que el hombre llama arte.
La chica le pedía que siguiera contándole, creyendo cada una de las palabras que salían de su boca.
Y eso no era lo peor que arruinaba la poca diversión que trataba de tener, ¡sino que a ella le gustaban esas historias!
E incluso le enseñaba otras pensando que era una clase de intercambio de información o algo así.
Se habían detenido junto al grupo al llegar la hora de almorzar en la cafetería del museo. Tsukasa esperaba en una mesa vacía a su única acompañante, ya se había acostumbrado a su presencia. Qué remedio...
━ Te traje un jugo...━ Soltó la rellenita dejando dicha bebida sobre la mesa mientras ella se sentaba con su bandeja.━ Traje bastante, por si tú también tienes hambre. Supuse que después de tanto contar aquellas fantásticas historias estarías hambriento...
━... Gracias.━ Dijo no muy seguro. Demasiada amabilidad le resultaba un poco incomoda hasta cierto punto.
La chica sonrió sacando de su bolsillo un frasco, luego de éste mismo sacó una pequeña pastilla naranja que echó en el vaso de plástico que había comprado después de echarle agua.
Tsukasa observó curioso como la pequeña pastilla comenzaba a disolverse haciendo demasiadas burbujas.
No le importaba tanto, pero aún así preguntó...
━ ¿Qué es eso?
━ Vitaminas.━ Contestó la joven comenzando a comerse un sándwich.
━ Ah...━ Las miró un momento en silencio.━... ¿Y para qué?
━ Porque las vitaminas me ayudan.━ Pronunció la contraria.━ Come algo, debes estar hambriento.
Tsukasa la ignoró unos momentos en los que ella le hablaba animadamente.
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❝Pink Lemonade❞ ❛Tsukasa×Lectora❜
Fanfic❝ Pienso que los besos saben a limón, ¿los tuyos sabrán a fresa? ❞