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El domingo estaba acabando, y agradecía a Salazar por eso, extrañaba a Harry, entre las pláticas con los de la Orden, y los trabajos que tenía que trabajar, adelanto pociones para la enfermería y ya eran casi las 8 y el Lord lo llamaría para ir a recoger a Harry, todo estaba casi arreglado y estaba agradecido que viviera para amar a Harry.

Al llegar por Harry, se encontró con una imagen algo extrañaba, el Lord veía desde el sillón, como Harry estaba entre algunas serpientes, una era Nagini, pero la otra no sabía.

- Buenas noches mi Lord, he venido a escoltar a Harry de regreso a Hogwarts,- dijo Severus, inclinándose al saludar.

- Claro Severus, podrías traerlo de nuevo la siguiente semana, además de que quisiera hablar contigo, pero será la próxima semana, que no soporto tu presencia- dijo el Lord jugando pero la verdad es que su voz no había salido con esa intención, y vio cómo su hijo se levantaba con la serpiente que le había regalado, le costó encontrarla, pero había valido la pena.

- Padre, no le hables así a Severus, - dijo casi con enojo a su padre.

- ¿Por qué?-. Dijo entrecerrando sus ojos, se le hacía sospecho eso, su hijo defendiendo a Severus, pero después recordó que Harry tenía una deuda de vida con Severus.

- Porque si le tratas así, no me traerá la próxima semana, además de que si sigues con esa actitud yo no querré verte.- dijo acercándose hacia al Lord, le dio un beso en la frente como despedida. – te veo la próxima semana y no llames a Severus antes de eso porque necesito que me ayude a estudiar un poco si quiero pasar los exámenes en pociones.

- Bueno. Trata de que el viejo te deje venir la próxima semana y que te deje tener a tu serpiente por lo que queda del curso. No olvides que te quiero. – dijo esto último en parcel,

- Nunca dirías esas palabras delante de alguien más verdad. No te preocupes padre te veré la próxima semana. – dicho esto, se volvió a Severus- vámonos.

Habían llegado a Hogwarts, le pidió tener la serpiente en sus aposentos. Pero Severus le dijo que no, de seguro también enviaba a la serpiente a vigilar lo que hacía Harry y que le diría a Lord, que pasaba mucho tiempo en sus habitaciones personales.

A regañadientes tuvo que ir a su habitación y dejar la serpiente en su cama, le pidió que no saliera de ahí, y volvió a las mazmorras con Severus.

- Sabes que tus palabras al defenderme harán que el Lord sospeche.-dijo Severus, cuando lo vio entrar, estaba estado en el sillón frente al chimenea.

- Por qué no le empiezas a decir suegro, sería más fácil que llamado Lord. – dijo al sentarse sobre su regazo cada pierna a un lado de Severus- porque no me dices primero que me extrañaste – dijo esto como un susurro en sus labios y moviendo sus caderas tentando a Severus, sintiendo como Severus se endurecía.

- No creo que le guste que le llame suegro, no quiero morir tan rápido, si, amor, te extrañe.- dijo para después tomar a Harry entre sus labios, y sostenerlo para evitar que se moviera más. – pienso decirle después de la graduación. Y pedir tu mano en matrimonio. – dijo mirándolo a los ojos, quería hacerlo oficial.

- Bueno, primero me lo tendrías que pedir a mí, sabes, y si no me tomas en este instante talvez te haga sufrir por unos meses diciendo que no.

- Eso es una amenaza, porque sabes lo que hago cuando estoy amenazado,- haciendo que Harry se atragante con su saliva cuando siento que sus ropas eran retiradas con magia. Y su entrada era lubricada con un hechizo.

- Entonces si me extrañaste,- dijo cuando sintió como Severus le abría un poco las nalgas haciendo que el lubricante saliera un poco.

- Mucho-

La vida que quiero vivirDonde viven las historias. Descúbrelo ahora