Miami's rumbas

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Era un bar muy chiquito, en una avenida donde había un montón de discotecas y bares. Éramos en el centro de la ciudad, se sentía influencias latinas, afros, caribeñas, era genial.

Pasábamos el resto de la noche a bailar, a perrear, a cantar. Para dos gringos, Cass y Caleb se mueven muy bien, pero no llegan al nivel de Kayla. No lo he especificado pero Kayla viene de Puerto Rico. De verdad ella incendio la pista toda la noche. Zac era muy tierno bailando, pero con un poco de alcohol, deja atrás su imagen de geek y, dios, jamás hubiera pensado verle bailar sobre canciones de Bad bunny. 

Extenuados, hemos dejado el bar a las 5 de la mañana.

-"En serio no siento mis piernas", se quejo Kayla.

-"Carajo yo tampoco, odio salir con ustedes, siempre pongo 3 dias para recuperar." dijo Zac

-"¡Deja de quejarte bobo, yo paso una noche de puta madre!" Dijo Caleb

-"Yo también, no sabia que las noches en Miami eran tan calientes" (risa), dijo yo riendo. 

-"Y ya no has visto nada cari", dijo Kayla. "La próxima vez te llevo en un bar de salsa y bachata, vamos a ver si te atreves."

Muy cansados, nos despedimos y subí en un Uber con Kayla y Zac, ya que vivíamos no tan lejos.

-"Al principio choca, no me quedaba bien, de verdad. Pero al fin, tu presencia no me molesta", me dijo Kayla.

-"Es un honor saber que su majestad soporto mi existencia.", dijo con sarcasmo.

Zac se puso a reir.

-"Que queen esa".

Kayla se paro primero, y Zac justo después. Llegué à casa a las 6 am, y, extenuada, me cayó en la cama sin quitarme el maquillaje ni la ropa. Me levanté el domingo a las 1 de la tarde. Me pido una tallarines y me puse a limpiar la casa. Me puse una camiseta negra muy grande de un grupo de rock, Mägo de Oz, que había robado a mi hermano, y un mini short negro. Puse la música muy fuerte y empezó la limpieza. Un golpe en la puerta me salió de mi karaoke. Abrí la puerta y vi a un chico que jamás había visto antes.

-¿Hola, tienes una balanza?

Estaba moreno, tenía el cabello pintado en rubio muy claro, pero le quedaba muy bien. Tenía una camisa de un equipo de basket muy grande, y muchos tatuajes en los brazos. En el brazo izquierda tenia dos enormes bandas negras, y otros pequeños tatuajes, y en el brazo derecha tenia flechas muy gruesas, y otros tatuajes. Fascinante. Estaba un poco más grande que yo, tenía ojos negros muy intensos. Raramente había visto alguien con tanta carisma. Era un poco más viejo que yo, supongo.

-"Hum hum."

Me Sali de mis pensamientos.

-"Disculpe, ¿qué me has dicho?"

-"Te estaba preguntado si tienes una balanza."

-"Pues sí creo que tengo. Pero tú eres..."

Tal vez ese tipo era una pura hermosura, pero no voy a prestar mi balanza a cualquiera persona.

-"Perdón, ni siquiera me he presentado. Soy Yash, el hijo de Lupe y Carlos. Mi ma me envió, ha rotado la suya y quiere cocinar buñuelos.""

-"Ah ya, eres Yash, mucho gusto soy..."

-"Ava, lo sé."

-"Bueno bueno, voy a recuperar la balanza".

El único día en el cual un tipo guapísimo viene pa mi casa, llevo ropa muy fea, y una resaca re tenaz. G.E.N.I.A.L. Me fui a la cocina a recuperar la balanza.

Él y yo [Ava y Yash]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora