Una de las cosas que Gun más odiaba de su vida adulta era hacer papeleo. Ayer en la noche lo habían llamado de la inmobiliaria para comentarle que había un inconveniente con su contrato, hoy a primera hora Gun se encontraba en la puerta de la oficina. Quizás lo que más le molestaba era tardar horas, entre prepararse, tomar el trasporte público y llegar, para hacer un tramite de menos de cinco minutos. Al salir del edificio, Gun casi chocó contra persona, la cuál se apresuró en disculparse y luego, según lo que llegó a ver , entró a la misma oficina de la que él había salido.
Su madre seguramente reiría al saber que el "inconveniente" había sido que le habían hecho firmar un contrato equivocado y que su contrato había sido firmado por un tal "Adulki-algo".
Esto definitivamente no podía causarle una buena impresión de la agencia, pero quizás estaba en concordancia con lo que pagaba de alquiler.
