El pacto de Cassie.

Capitulo 5

Baje del autobús con muchas ganas de encontrarme con Aiden. Quería decirle que sentía mucho lo que había ocurrido, que me tenía para cualquier cosa, que podía contar conmigo. A lo lejos lo vislumbre. Salí corriendo era ahora o luego iba arrepentirme.

– ¡Aideeeen! – Le salude acercándome a él – ¡Espera, tengo algo que decirte! – le dije a la vez que la estúpida de Ali se acercaba a él. Me paré en seco.

No podía ser. ¿Estaban otra vez juntos?

Me había escuchado. Ambos se giraron a la vez, y vieron mi cara de ¡Hola soy estúpida! 

Aiden avanzó hacia mí, pero Ali le cogió del brazo impidiendo que avanzara más. ¡Ya lo estaba fastidiando todo!

 Avance hacia el, no podía quedar como si fuera una estupida, despues de haberle gritado – ¡Ey.. hola!

– Oye Cass.. mira que siento lo de ayer...  no quería que.. 

Le interrumpí. – No te preocupes, soy yo quien tiene que pedirte disculpas... siento que la cita, no hubiera terminado bien – ¿Cita? Acababa de decir que era una cita delante de Ali. ¡Dios subconsciente que estas haciendo!

– ¿Cita? Tu Aiden, ¿has tenido una cita con la asquerosa de Cassie? – Ali miró primero a Aiden, para continuar mirándome de arriba y abajo a mí, posando sus grandes ojos – ¿Te crees importante Cassie? No eres nadie enfrente de mí, eres esa mosca que merodea alrededor de la comida de alguien – se acercó más a mí, y echó su pelo hacia atrás – Aiden, solo saldría contigo para contarte lo mal que está por mí, jamás acabaría saliendo contigo. Das pena Cassie, muchísima pena. – Está alzó su manos, y empujándome hacia atrás, haciendo que cayera en un precioso charco que justo estaba detrás de mí.  ¡MARAVILLOSO!

– ¡CASS! – grito Aiden, avanzó hacia mí, pero Ali cogió su brazo y le retiro demasiado rápido para que pudiera ayudar a levantarme. 

– Dejala , Aiden – le dijo dándole un beso – ¡Tiene que saber que eres mio, y que nadie nos separara! – Ali me miró, mientras me levantaba –  Ayer quedo contigo por pena, recuerdalo Cassie. ¡Aiden está conmigo, tú no eres nadie para él!

Me incorporé al mismo instante que Ali, le dio un giro a Aiden para que me diera la espalda. Ali me miró una vez más con una mirada desafiante, y de nuevo alzó su pelo al frente. ¡Había ganado! Me había ridiculizado delante de Aiden, y el... No había hecho nada para impedirlo... ¡Esto es ridículo! Estaba llorando por alguien que no lo merecía, era... ¡Era ridícula!