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-¿Estás muy ocupada?-ella miró directamente a la puerta y negó, Liam entró con un paquete de donas y cerró la puerta, le sonrió como un niño pequeño.-Es sobre el chico de tinder.

-¿Descubriste que es menor de edad?-Liam se sonrojó y negó, le entregó una de las donas mientras se sentaba.

-Eso ya lo sabía, Becca. Creo que desde el siglo XVII esas prácticas son normales.-Rebecca rió.-Supongo que ya se a quién le chupó la polla Molly.

Becca alzó ambas cejas, Liam al parecer había tomado la noticia ¿demasiado bien?

-Sé lo que estás pensando, pero tu hermana lo ayudó, es decir...-Liam suspiró.-Es un chico de 17 años con padres estrictos y que no van a aceptar que sea gay. 

-¿Estás intentado decir qué mi hermana no es tan mala?-Liam por fin sonrió y negó.

-No, es una arpía, pero mintió por Zayn y ahora para mí, no es tan mala.-Becca le sonrió.-Entonces, creo que quizás quiero intentarlo, aún cuando todo está en mi contra.

Rebecca admiraba la determinación de Liam y pensó que ella quizás también debería arriesgarse con el chico de ojos verdes.

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Había llegado a casa con comida china, Molly estaba dormida en el sofá y se estaba reproduciendo Dirty Dancing, Rebecca sonrió, su madre adoraba a Patrick Swayze, decía que su padre era idéntico en su juventud.

Se sentó en el sofá y decidió hacer una pequeña tregua en su mente cuando vió el maquillaje de Molly corrido, probablemente había estado llorando y ella se sentía culpable. Acarició su mejilla y su cabello, Molly relajó su rostro y Becca sonrió, terminaría de ver la película.

Ambas terminaron profundamente dormidas en el pequeño sofá del departamento.

-Rebecca ¡Becca!-se despertó enseguida y vió a Molly con un gesto enfadado.

-¿Qué diablos te sucede?-Beca tocó su cuello, definitivamente le iba doler la espalda todo el día.

-Son las ocho, necesito que me lleves al instituto.-Rebecca se levantó de repente, ignorando el pequeño mareo. Había perdido una reunión.-¡Tengo un examen a en media hora!

Rebecca rodó los ojos antes de entrar al baño para ducharse, su tregua no había durado lo suficiente.

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Harry vió como Molly llegaba corriendo a la clase de matemáticas, luego miró a su alrededor, era él único con una silla vacía y suspiro fastidiado.

-Que sea la última vez que se repita, señorita Grant.-ella asintió fastidiada pero sonrió cuando vió a Harry.

-Hola.-él simplemente hizo un gesto con su cabeza, su profesor pasó por cada uno de sus puestos y entregó sus exámenes.

Harry no era muy bueno con los números, de hecho era pésimo y no había estudiado la noche anterior por estar demasiado caliente pensando en Rebecca, Niall se había preocupado al notar sus grandes ojeras, pero él había disfrutado su noche.

Luego de que pasaron 15 minutos, Harry aún seguía estancado en las primeras preguntas y suspiró frustrado, hasta que sintió una mano que apretó su pierna, miró directamente a Molly, ella cambió sus exámenes, ya tenía escrito su nombre y estaba totalmente resuelto.

La miró confundido pero cuándo el profesor llamó su atención no tuvo más remedio que volver su mirada hacia el exámen. No sabía si las respuestas eran correctas pero si era sincero, no entendía absolutamente nada y cuando miró de reojo a Molly, ella estaba haciendo los ejercicios con bastante rápidez y seguridad.

El timbre sonó luego de 15 minutos, el profesor se acercó para recoger sus exámenes y cuando fue a agradecerle a Molly, está salió practicamente corriendo al ver a Zayn.

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Rebecca estaba de nuevo estacionada frente al instituto, quizás estaba un poco decepcionada al no ver a Harry como la anterior vez, solo decidió encender un cigarrillo mientras esperaba a Molly, pero el día no parecía estar a su favor, ya que no encontraba su encendedor.

-¿Necesitas fuego?-ahí estaba el moreno que tenía enamorado a su mejor amigo, asintió y Zayn le ayudó a encender el cigarrillo.-Siento lo de hace algunos días, bueno... También por el problema de Molly.

Ella asintió sin prestarle mucha atención y miró hacia otra dirección mientras daba otra calada.

-¿Rebecca, cierto?-lo miró y se fijó por un momento en lo largas que eran sus pestañas.-Yo...quiero a Liam ¿sí? También quiero a tu hermana, así que pienso que si ambos tenemos esos intereses en común, no tenemos porque llevarnos mal.

Becca le sonrió, ya entendía porque Liam y Molly lo querían tanto.

-Bien, Zayn. Sólo, no vuelvas a meter a mi hermana en problemas.-él asintió.

-¿Vienes por ella todos los días?

-Desde que empezó la detención.-él asintió en comprensión.

-Si estás muy ocupada, yo puedo encargarme de llevarla a casa, tengo una motocicleta.-ella sonrió.

-Aún no te daré el beneficio de la duda.-Becca notó a Harry y Molly en la entrada del instituto, los ojos del castaño se encontraron con los suyos.-¡Molly, al auto!

Notó la cara de fastidio de su hermana, pero también, el momento en que le dió un beso en los labios a Harry. Su cara cambio por completo, apretó el claxón e hizo que los tres muchachos se sobresaltaran. Molly fue corriendo hacia el auto.

-Adiós Zayn.-Molly dejó un beso en su mejilla y entró al auto con una sonrisa.

-Adiós Molly.-Zayn hizo un gesto con la mano y luego miro a Rebecca.-Nos vemos.

Rebecca ni siquiera le dirigió la mirada al muchacho de ojos verdes, tiró el cigarrillo y encendió el auto.

good boy - harry stylesDonde viven las historias. Descúbrelo ahora