Llegó⬅

322 26 7
                                    

El aula era un caos, mis compañeros parecían no poder cerrar su boca. Algunos parecían hablar por el simple hecho de hacerlo, otros soltaban comentarios que me sacaban una risa involuntaria.

Pero los que más me incomodaban, eran aquellos comentarios con respecto al ámbito sexual.

—Nahee. —mi mejor amiga movía su mano frente a mi rostro, pero yo estaba metida en la plática de las chicas detrás de mi.—

—Lo vi en el estacionamiento, ¡es precioso! —chilló la pelos de elote, como mi mejor amiga y yo le decimos a Kim Jisoo.— Tiene los labios más deliciosos que he visto y sus brazos. ¡Uy!

—¿De verdad que lo has visto? —Contestó Daehyun—

—¡Te lo juro! Se ve que es un amante del gimnasio, su cuerpo está como para hacerme...

Y hubiera seguido escuchando, de no ser por el empujón que me dieron, que casi hacía que me cayera de mi pupitre.

—¡Lisa! —chillé por lo bajo.— Casi me caigo.

—Créeme que estuve a punto de tirarte porque parecías drogada.

Se levantó de su lugar hasta quedar junto a la paleta de mi pupitre, justo donde yo estaba sentada.

—¿Qué te tiene tan pérdida?

—Bueno, digamos que estaba metida en una conversación. —con mi dedo pulgar señalé al grupo detrás de mi, haciendo que mi mejor amiga se uniera a mi oreja larga.—

Y cuando estaban por decir algo aquellas fanáticas del sexo, el rector de la Facultad entró acompañado.

Yo no me moví de mi lugar, pues cada vez que me veían sentada de aquella manera, sólo suspiraban rendidos. Era gracioso, porque parecían rendirse al ver que más de uno se sentaban en donde debería utilizarse para tomar sus apuntes.

—Buenos días jóvenes. —soltó con su áspera voz el rector.— Como algunos ya se habrán enterado, su profesor de anatomía solicitó su transferencia y hoy ha llegado su nuevo profesor.

Y entonces fue cuando fijé mi mirada en aquel sujeto. Ese mismo que parecía mirarme con profundidad, haciendo mis mejillas sonrojarse y que bajara mi cabeza con rapidez.

—Profesor, sea Bienvenido. Lo dejo en su ahora aula.

Y sin decir más, el rector salió del lugar dejando aquel aire de suspenso y un poco de erotismo al tener un profesor como aquel.

Caminó en silencio hasta quedar frente a su escritorio al centro del aula y cuando volvió a fijar su mirada en mi, habló haciendo notar aquella voz tan masculina que seguramente no sólo me estremeció a mi.

—Señorita, ¿Podría sentarse correctamente?

¡Que idiota! Se me había olvidado por completo que seguía sentada en la mesilla de mi lugar, haciendo que la falda que llevaba se subiera más de lo debido.

De inmediato brinqué y acomodé mi falda como debería de estar. Hice una pequeña reverencia, más que avergonzada, y me senté ahora correctamente. Tal y como él había pedido.

Lisa por su parte, soltó un suspiro que no supe traducir y también regresó a su lugar justo en el primer asiento.

—Bien, como les dijo el rector, yo soy su nuevo profesor de anatomía. Mi nombre es Jungkook pero se referirán a mi como Profesor Jeon.

Y como si aquel día estuviera en mi contra, el nuevo maestro caminó hasta quedar frente a mi. Y no me fue extraño que no pudiera sostener su mirada, perecía que ante sus ojos yo era la única alumna. 

Una que seguramente no causó buena impresión al estar sentada de manera incorrecta y con la falda más corta de lo que debería de haber estado. 

¿Me habrá visto?

Escuchaba cuchicheos detrás de mi, pero no le hice caso, pues muchos de ellos eran con referencia a lo guapo y sexy que estaba el nuevo profesor de anatomía. 

—Para comenzar, les diré mi forma de trabajo. —Y parecía hacer aquello a propósito, dejar salir su voz autoritaria que me hacía esconder cada vez más mi cabeza.— Al tomar mi clase, estarán comprometidos a comportarse debidamente.

Listo, me quedó claro. No me vuelvo a sentar en mi mesilla.

—No tolero las impuntualidades. Así que deben estar dentro del aula antes de que yo entre.

Anotado.

Con mi cabeza casi en mi mesilla, giré levemente para ver a mi mejor amiga, quien parecía estar de lo más entretenida con mi comportamiento.

Y así fue como pasó la clase, y sentí soltar todo el aire acumulado cuando escuché la campana que indicaba el descanso sonar.

El aula se vació tan rápido en cuanto el profesor nos dio pase de salida, pero no sé que me pasaba por la cabeza que guardé mis cosas lo más lento que pude, viendo de reojo como él se quedaba sentado en su escritorio y desabrochando un botón de su camisa.

Dios mío, eso no puede estar pasando.

—¿Nahee? ¡Vamos, Hani no espera en la cafetería!. —y con su simple voz chillando, llamó la atención del profesor haciendo este dirija su vista a mi.—

—¡Ya voy Lisa! —Me apuré a meter mis cosas a la mochila para salir lo más pronto de aquel asfixiante lugar.—

Pero en cuanto estuve por salir, aquella voz autoritaria volvió a causar estragos en mi.

—Señorita Nahee.

Al girarme pude ver como se levantaba de su lugar, para caminar hasta donde antes yo estaba sentada. Su ancha espalda me tapaba la vista de lo que hacia ahí en mi pupitre.

—Creo que olvida algo. —se giró lento hasta dejarme ver en sus manos la que era mi chaqueta.—

—¡Oh! —expresé apenada.— Lo siento. —caminé hasta quedar frente a él pero con una distancia prudente.— No recordaba que se haya caído. Gracias.

Él extendió su mano que tenía mi chaqueta y yo la tomé, sintiendo como al rozar mis dedos con los de él me causaba choques eléctricos dentro de mi.

En cuando me alejé de su tacto, reverencié y salí lo más rápido de ahí.

Me sentía extraña, jamás en mi vida como estudiante había sentido tantos nervios en a lo que se refiera hablar con un profesor. 

Jeon Jungkook era diferente. 

Dear Teacher |JJK| |+18|Donde viven las historias. Descúbrelo ahora