My King ✧ Junghope

♔ 16

El castaño se acercó con timidez al alfa que se encontraba en el borde de la cama, este al sentir su aroma de vainilla y cereza volteo a verle.  Jungkook noto el nerviosismo que tenía Hoseok, por lo que el alfa empezaba a preocuparse sobre que podía estar pasándole.

—Hoseok, necesito saber que me pasa. SeokJin no me quiso decir y me dijo que te preguntara —el alfa se levantó de la cama para ir hacia el castaño.

—Es que... es complicado —el menor empezó a jugar con sus manos nervioso.

—Necesito saber ¿Qué pasa si muero? —Jungkook estaba desesperado.

—¿Tu lo sabias verdad? —el menor empezó a derramar lágrimas.

—¿Saber qué cosa? —el mayor estaba confundido.

—T-Tu sabías que somos destinados... —susurro Hoseok sollozando, dejando al rey sorprendido.

—¿Q-Qué? Y-Yo... —el alfa se había puesto nervioso.

—Si sabías... ¿¡Por qué no dijiste nada!? —el menor grito la pregunta.

—¿Y qué querías que dijera? —dijo Jungkook—"Hola Hoseok, eres mi pareja destinada y debemos estar juntos" —el rey hizo una imitación— ¿No sería algo tonto?

—¡No solo se trata de ti, también estoy involucrando en esto! —el castaño grito enfadado.

—¡Pero no sabía cómo decírtelo, no es algo que se toma a la ligera! —Jungkook también estaba enfadado— ¡Además, eso no explica el por qué me desmaye!

—¡Pues yo no pienso explicarte nada! —dijo el castaño para después dirigieres al armario y agarrar aquella capa celeste con toques dorados que tenía cuando llego al castillo, para después irse corriendo.

Mientras Hoseok corría, se puso la capa y cuando ya la tenía puesta se fue hacia la entrada de castillo. Cuando ya estaba allí, fue hacia la gran puerta y como pudo, la abrió.

Hoseok se dio cuenta que Kwan lo vio mientras corría, pero el castaño solo siguió corriendo hacia afuera del jardín delantero del castillo. Cuando por fin estuvo totalmente fuera del castillo, se dirigió a un bosque que estaba cerca de allí y se adentró a este. Hoseok se escondió detrás de un árbol, aun pudiendo ver el castillo, y es cuando se dio cuenta que un grupo de guardias salió del castillo, y el castaño supuso que irían a buscarlo. El omega necesitaba estar al aire libre para pensar lo que ocurría.

Hoseok se adentró aún más al bosque, perdiendo de vista al castillo. El castaño corrió, hasta que se cansó y se sentó en una roca que estaba allí en el piso y empezó a llorar. Se sentía engañado, aun cuando el ya sospechaba que era la pareja destinada de aquel rey, le enojaba que el supiera y que no le haya dicho nada; además de que tenía miedo, miedo de que aquel alfa le maltrate y tenga que permanecer a su lado.

La noche ya había caído, el castaño siguió llorando, hasta que un ruido extraño lo puso alerta. Pisadas se escuchaban, por lo que inmediatamente se paró de su lugar, las pisadas se hacían cada vez más fuertes, asustando al castaño y de un momento a otro, el castaño se vio rodeado de lobos.

—¿Q-Que q-quieren? —preguntó con miedo el castaño, para que después uno de esos lobos de transformara a su forma humana.

—El príncipe de Busan... — dijo aquel hombre sonriente— Lo hemos estado buscando durante mucho tiempo, príncipe.

—¡Aléjense! ¡No volveré a Busan, si me fui es por algo! —el castaño grito enfadado.

—El rey de Busan nos mandó a buscarlo, no podemos desobedecer. —aquel hombre dijo para después acercarse al castaño.

—¡No me toques, no volveré! —el omega siguió gritando.

Hoseok se dio cuenta que más lobos se transformaron y lo sujetaron. El castaño gritaba que lo dejaran en paz, pero no hacían caso. De un momento a otro, se dio cuenta que, frente a ellos, había un gran lobo castaño con más lobos detrás de él, aquello lo confundió, pues no reconocía a aquel lobo castaño, hasta que un aroma a de cierto alfa conocido llego hasta el, supo de quien se trataba.

Hoseok fue testigo de ver como Jungkook mataba con sus dientes y garras a aquellos hombres que lo sostenían, así pudiendo estar libre. A lo lejos, Hoseok pudo ver a Kwan en su forma humana, quien le decía con gestos que se acercara. El castaño sin dudar se acercó al guardia que estaba a lo lejos.

—Debes volver al castillo —le susurro Hoseok cuando el castaño estuvo frente a él.

—N-No... ¿Qué pasara con Jungkook? —el castaño volteo a ver al lobo que peleaba con los otros.

—El estará bien, él es fuerte, no por nada es el rey. En el castillo te está esperando SeokJin, ve —le dijo Kwan con una sonrisa.

Hoseok volvió a dar un vistazo al lobo castaño, dándose cuenta que manejaba completamente la situación. El omega corría con rapidez, temiendo que uno de los lobos de Busan lo atrapara. Cuando pudo ver el castillo a lo lejos, dio un suspiro aliviado y corrió hacia allá. Cuando estuvo frente a la entrada del castillo, pudo ver a SeokJin, quien mordía sus uñas con notoria preocupación y nerviosismo.

Cuando el pelirrosa vio al castaño, corrió hacia él y le dio un gran abrazo. El castaño estallo en llanto nuevamente, sabía que todo era su culpa, que Jungkook estaba en peligro peleando por su culpa.

—Ven, vamos adentro —el pelirrosa guio a Hoseok hacia su habitación y se dirigieron al baño.

SeokJin le pidió al castaño que se aseara y el menor le obedeció aun entre sollozos. Cuando Hoseok salió, pudo darse cuenta que tenía unas cuantas cortadas en su piel y algunos moretones.

Cuando el castaño salió, SeokJin lo recibió con un abrazo. El mayor se sobresaltó al ver las pocas heridas del castaño, así que empezó a curarlo. La noche había caído en cuanto los lobos de Busan encontraron a Hoseok, por lo que ambos omegas empezaron a preocuparse cuando empezaba a amanecer y los guardias y el rey no regresaban.

El mayor le pidió al castaño que comiera algo, pero este se negó, preocupando al mayor, puesto que en todo el día de ayer no había comido por andar en el bosque.

En un momento, los dos omegas escucharon gritos afuera del castillo, por lo que ambos se dirigieron allá, viendo a Hoseok caminando y a Jungkook gravemente herido, recargándose en Kwan para caminar y no caerse. En cuanto el alfa vio que Hoseok estaba frente a él, totalmente seguro, sonrió, para por fin caer inconsciente.