Las mejores experiencias, se viven en secreto...
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AVISO:
La historia es 100% ficción, independientemente de que se usen situaciones que si sucedan en la vida real, en esta historia solo se usan los involucrados como pe...
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-TAEROSÉ ESPECIAL. Parte 2-
Taehyung POV
Veia a Rosé de reojo mientras manejaba mi carro, parece simplemente un ángel
Ella miraba por la ventana mientras trataba de saber a donde íbamos, realmente no se como iniciar una conversación en esta situación...
-Parece que lloverá hoy- Por suerte para mi, ella inicio la conversacion
-Si... dijeron que por estos días había probabilidad de tormenta electrica-
-Mientras no sea hoy, todo bien- Me sonrio con esa linda sonrisa que tiene. Le di una sonrisa de respuesta.
Segui avanzando, hasta llegar al cruce de una avenida
-¿Por qué nos detenemos?- Ok... Ahora o nunca
-Si damos vuelta a la derecha y seguimos la avenida llegaremos a uno de los mejores restaurantes de Seul... Si seguimos adelante... Llegaremos a mi apartamento... Tu decides- Levante las manos, como si me estuvieran asaltando y me recosté en el respaldo del sillon
-Se de que restaurante hablas... La comida no es tan buena- Se recargo en la ventana, y por el espejo retrovisor pude notar su leve sonrojo
-¿Qué quieres decir?- Me reacomode en mi asiento, poniendo mi mano en la palanca preparado por si me decía que avanzara
-Digo que- Hizo una pausa, haciendose un poco hacia delante, poniendo su mano sobre la mia, para hacer que yo empujara la palanca -Avanza, ni loca voy a dejar que se moje mi cabello- Despues de eso regreso su vista a la ventana y no dirijimos mas palabra en todo el camino, pero no fue realmente necesario necesario
Decir que fui con una sonrisa de tonto todo el camino restante
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Rosé POV
¡OH DIOS! ¡¿PORQUE HICE ESO?! Por favor no lo mal interpretes. Por favor no lo mal interpretes.
Siempre fui una chica timida, que siempre espero a que alguien se acercara a mi por primera vez y no tuviera que dar yo el primer paso... ¡Pero acabo de ser una completa sinverguenza!
Decidí que lo mejor para mi era no decir nada el resto del camino.
Aproximadamente 15 minutos después estábamos entrando al estacionamiento de un lujoso edificio. En el ascensor tampoco dije nada, no quería meter la pata otra vez, solo actuaba como si no me importara.
