Capítulo 1

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La historia de Ten y Lucas comenzó cuando tenían 8 años y como muchas historias comienzan: por una mudanza.

Ten había nacido en Tailandia, en una familia de posición media conformada por sus padres y hermana. Se habían mudado a China cuando Ten tenía solo un año pero su familia se encargó de enseñarle el idioma. Mientras en su casa solo hablaban tailandés, fuera de ella sus amigos y en su escuela le hablaban en mandarín.

La ciudad a la que llegaron y el vecindario donde comenzaron a vivir era un lugar tranquilo. Todos los vecinos se conocían y se ayudaban unos a otros cuando lo necesitaban. Así, Ten también había hecho muchos amigos de solo la calle en que vivian y su escuela, que quedaba a cinco minutos caminando. Era una buena vida.

Cuando Ten cumplió ocho años, Lucas llegó al vecindario y a su vida.

La primera vez que se encontraron Ten creyó que el chico era tímido y callado. Incluso sus primeras palabras fueron ignoradas hasta que la madre del chico le explicó que dado que antes vivian en Tailandia, los conocimientos del idioma eran limitados y casi nulos.

En cuestión de días se hicieron muy buenos amigos, jugaban y estudiaban juntos. Gracias a Ten, Lucas comenzó a hablar más aunque su mandarín no era muy bueno. Era más sociable y solía buscarlo casi en cualquier momento del día. En la mañana cuando ambos iban a la escuela, durante las clases cuando podían verse, en la tarde para que regresaran juntos o cuando Ten solo estaba descansando en su casa, Lucas llegaba.

Usualmente estas actitudes lo molestarían pero era Lucas, Yukhei, y la forma tan tímida en que le pedía que jugaran juntos o que lo ayudara con una tarea era simplemente imposible de denegar.

Pero llegó el día, aquellos días en que todo cambiaba.

Llegó la secundaría.

Para el primer año de secundaria, Lucas llevaba dos años viviendo en otra casa. Solo unas calles más allá de la casa de Ten pero fue suficiente para que dejaran de verse tan a menudo como antes. Y en la secundaria, no compartían clases por lo que sus tiempos juntos se limitaban a los almuerzos, cuando estos coincidían.

Así, poco a poco dejaron de verse y pasar tiempo juntos. El punto culminante fue cuando comenzaron a hacerse amigos de las personas que compartían sus mismas clases. Ten, por su lado, había conocido a Taeyong en el club de baile y rápidamente se hicieron buenos amigos. Ambos habían descubierto que les gustaban los hombres y eso solo los unió más. Por el lado de Lucas, él había conocido a Johnny y Jaehyun, ambos eran nuevos en la zona pero se hicieron famosos por ser extranjeros y sus personalidades tan playboy y sociables que se hicieron más intensas cuando fueron creciendo.

A Ten le gustaba que Lucas hiciera amigos, pero no de esa clase. Lucas siempre había sido tierno y algo tímido. Sin embargo, cuando se unió a ellos dos comenzó a ser mucho más coqueto y, aunque Ten sabia que muchas veces lo era sin darse cuenta, no dejaba de molestarle, porque Lucas no era así. Y no, claro que no ayudó que a medida que fueron creciendo, Lucas literalmente creció. Durante su infancia él fue un poco más bajo que Ten, solo un poco, pero cuando creció, sobrepasó la altura de Ten por casi dos cabezas.

Lucas era tremendamente alto y, sumado al hecho de que su cuerpo era delgado pero tonificado, también bastante caliente. Nadie podía culparlo de que le gustara físicamente.

Nadie excepto Taeyong.

Desde que Taeyong supo de su gusto físico por Lucas, se había encargado de avisarle cada vez que el más alto estaba en el gimnasio. Porque la ventana del salón de su clase de historia daba justamente hacia la entrada de la escuela, y a unos cien metros se encontraba el gimnasio. Con unas ventanas de suelo a techo y con las máquinas de hacer pesas justo a ese lado, podía ver perfectamente a Lucas y sus amigos hacer sus rutinas.

Actualmente estaban en el penúltimo año de secundaria, y sus interacciones con Lucas estaban limitadas a los saludos que se daban cuando se veian o casualmente quedaban cerca en el restaurante. Nada más.

Por esa razón, y por muchas otras, Ten no salía de su sorpresa por la confesión de Yukhei.

***

Ten caminaba con dirección a la cafetería junto con Taeyong cuando sintió un pesado brazo pasar por sus hombros. No tuvo necesidad de mirar para saber que era Yukhei quien estaba a su lado, solo el grande de su mano sobre su cuello y su olor característico eran suficientes para indicarle quién era. No quiso mirarlo directamente y estuvo tentado a separarlo de su lado, pero las miradas curiosas de personas que estaban en el pasillo lo hicieron sentir importante.

Aunque esperaba que Taeyong dijera algo, se negara a ser separado de su amigo o siquiera se molestara por ser dejado de lado, solo lo vio sonreir y detenerse lo suficiente para ponerse a la par de Jaehyun y Johnny.

Traidor.

— Hola Ten, ¿Cómo está el chico más bello de la secundaria? 

Ten arrugó su nariz e hizo un sonido de disgusto con su garganta.

— Vaya, ¿Con esa frase conquistas a todos? Me pregunto que será lo siguiente que digas? ¿"Puedo llevar tu comida, cariño"? -Imitó la voz de Lucas, frunciendo su entrecejo como si fuera una cara sumamente atractiva.— ¿Qué es lo que ven en ti con esas palabras?

A pesar de sus filosas palabras, pudo ver como los pómulos de Yukhei se tornaron rosas y una sonrisa amplia, pero nerviosa, apareció en su rostro. 

— Creí que te gustaría escucharlo. —Se encogió levemente de hombros.

No lo dijo, pero a Ten sí que le había gustado. Le gustaba tener la atención sobre él, si era más sencillo decirlo.

Continuaron su camino hasta que entraron en la cafetería. Yukhei los guió a una de las mesas desocupadas en el centro del lugar. Ambos se sentaron el uno junto al otro, Johnny fue por su almuerzo, Jaehyun y Taeyong también se sentaron juntos mientras Ten sacaba su propio almuerzo y comenzaba a comer.

- Entonces... ¿Qué es lo que tienes planeado? -Taeyong habló, cruzando sus brazos sobre la mesa y apoyando su mentón sobre estos. Su mirada se dirigía a Lucas.

- Es asunto de ellos. -Dijo Jaehyun a su lado, la voz suave los sorprendió, tanto a Ten como a Taeyong. Nunca lo había escuchado decir una palabra.

- Pero es mi amigo, y quiero saber.

- Que Ten se lo pregunte entonces, ¿no crees?

Taeyong hizo un puchero, mirando ahora a Jaehyun, el cual permanecía serio a su lado. Luego desplazó su vista hasta Ten y este suspiró resignado. Bajó sus palillos y limpió su boca antes de hablar. En realidad no quería saber nada de ello, ya suficiente era tener que almorzar con ese grupo de personas.

- ¿Qué tienes planeado, Yukhei?

Al parecer fue sorpresa para Jaehyun y Johnny, que iba llegando, que lo llamara de esa forma, pero no dijeron nada.

- Nuestra primera cita, te llevaré a comer helado.

Ten solo asintió, de acuerdo con ir a la cita.

Después de ello no compartieron más palabras. Todos en la mesa hablaron, incluso Taeyong que normalmente era bastante tímido estaba intercambiando palabras con los otros dos hombres. Lucas mantuvo su mirada en Ten, con una mano en su antebrazo como si quisiera tomarle la mano pero no fuera capaz. Ten solo le dirigió la palabra nuevamente hasta que tuvieron que volver a sus clases. Lucas besó su mejilla como despedida y una vez más huyó antes de que Ten pudiera decir algo.

***

Hola, Hola.
Pequeña notita para aclarar unas cosas u_u: aunque la historia se ambientará en China, no tocaré temas culturales ni de homofobia puesto que no quiero agregar dramas a una historia tan corta como la que planeo hacer.
Y probablemente los días de actualización serán los viernes. Esta la hice hoy porque me sentí inspirada luego de la depresión post concierto. 。:゚(;´∩';)゚:。

Espero les guste y disfruten -u-.

「 La Apuesta de Ten 」LuTenDonde viven las historias. Descúbrelo ahora