Superficial || Taehyung y Tú

Capítulo 1

Todo parecía ir relativamente bien. _____ iría al concierto de Bangtan, sus sueños prácticamente se harían realidad. No podía negar cuán emocionada estaba por ello, hasta ganas de llorar sentía.

—¡Mamá! Por favor dime que no es un sueño, que yo _____ iré al concierto de BTS, mi grupo favorito.

Daba vueltas por la sala de estar sin creer lo que en horas sucedería, mientras me imaginaba un sinfín de cosas que podrían llegar a suceder.

—¡_____! Basta. Sé que estás emocionada por el concierto de esos chicos, pero por favor detente, me vuelves loca —dijo molesta mi madre, mientras me miraba con el ceño fruncido.

—Eigh, lo siento mamá, es sólo que aún no puedo creerlo. Es un sueño cumplido para mí, algo que no creí que me sucedería, ya sabes, por mi mala suerte —respondí soltando una risita.

—Hija, tú no tienes mala suerte, si yo te compré esa entrada es porque sé que sigues y admiras mucho a esos jóvenes cantantes. Además, he de admitir que me recuerdas mucho a mí en mi adolescencia, amaba al grupo Backstreet Boys con todo mi corazón, claro, hasta que llegó tu padre y me puso el mundo de cabeza.

Dicho eso, llevé mi mirada hacía el suelo totalmente afligida, y luego miré a mi madre.

—Sabes mamá, extraño a papá. Lo mencionaste y fue inevitable pensar en él.

—Hija, te comprendo. Yo también lo extraño muchísimo, como no tienes idea, pero estoy segura que él ahora está mejor descansando —sonrió, me agarró por los hombros y me pegó unas palmaditas suavemente—. Cambiando de tema, creo que ya es hora de que te vayas a poner otra ropa, en sólo unas horas será el concierto y tienes que viajar hacía el estadio, recuerda que son al menos dos horas en irte y venir. También, te dejé dinero en el mesón por si lo necesitas.

—Gracias mamá, eres la mejor, te quiero —contesté, y le dí un beso a mi mamá en la mejilla en forma de despedida.

Me largué al baño y me desvestí tan rápido como pude, para así después poder ducharme. Al terminar mi ducha, la cual no demoró mucho, agarré una toalla y la envolví en mi cuerpo esbelto. Rápidamente me dirigí hacía mi habitación, cogí mi ropa interior, y luego escogí un pantalón color negro y una blusa blanca. Realmente no había mucha ciencia en mi vestuario, era simple, cómodo, y de cierta forma, bonito.

En cuanto terminé de vestirme me coloqué unos botines, los cuales me hacían lucir más alta, eso no me vendría mal, pues al estar en VIP podría observar mejor a los chicos.

Me miré al espejo y agarré una peineta, me peiné mi cabello con suavidad y luego me maquillé, pero no tan extravagante, y no porque no me gustara, sino porque no sabía cómo. Probablemente hasta Bangtan sabía más sobre maquillaje que yo misma.

Pensé unas dos veces en si rociarme o no perfume, pero luego decidí que no. ¿Se imaginan el olor que causaría la mezcla del desodorante y el perfume? Además, hay que recordar que posiblemente también sudaría y eso no me vendría nada bien.

Después de unos minutos salí de mi habitación, y mi madre ya no estaba, seguro fue a ver algo sobre su empleo.

Miré la hora de mi celular y ya faltaban tres horas, lo que era técnicamente perfecto, tenía el tiempo medido. Agarré el dinero que me dejó mi mamá y lo guardé, rápidamente salí de casa luego de eso, tomé el bus que me llevaría hacía el estadio y me senté, pues para mi suerte, este estaba casi completamente vacío, sólo estaba yo y otra chica. Saqué mi celular y mis audífonos que tenía en mis bolsillos delanteros, me los coloqué y presioné mi PlayList de Bangtan.

Luego de unos minutos, mejor dicho horas, desperté, sí, me había quedado dormida. Me sobresalté y miré a la chica que estaba frente a mí.

—Lo siento si te molesté, de verdad no quería hacerlo, pero no pude evitar darme cuenta de que estás escuchando música de BTS. Hoy hay un concierto, al cual yo voy, por cierto. Entonces pensé que quizá tú también irías, por lo cual decidí despertarte.