Narra Bárbara.
Es sábado y despierto algo tarde, me quedó mirando el techo por un momento hasta que decido levantarme, cuando muevo mi pierna siento como si un hueso de mi cadera se fuese movido bruscamente seguido por un dolor que sobrepasa la escala del 1 al 10 en dolor. Grito fuertemente pero nadie viene, donde demonios están.
-NICOLAS, MAMAA!-grito pero no hay respuesta. Siento como las lágrimas corren por mis mejillas, buscó mi teléfono debajo de la almohada, marco al primero numero que se me ocurre y espero a que atiendan rápido.
-Hola bárbara, justo pensaba llam... -Harry dice pero lo interrumpo.
-Harry, por favor ven ya a mi casa...-Un grito se escapa de mis labios. -Es urgente, por favor.
-Que ocurre? Que te paso? Hay alguien contigo?. -Pregunta con un tono de preocupación.
-Estoy sola, por favor date prisa... -Hago una pausa para respirar profundo. -En la puerta principal, debajo del matero hay una abertura en la madera del piso, levanta la tapa y saca la llave de repuesto.
-Voy enseguida. -Dice y cuelga. Dejo el teléfono a un lado y me muevo un poco para ver mi cadera, esta morada e hinchada, realmente luce mal. No puedo soportar el dolor. Siento que pasa una eternidad hasta que siento la puerta principal cerrarse.
-BARBARA!. -Oigo la voy de Harry llamar desde la planta baja.
Intento moverme para ponerme de pie pero el dolor es insoportable, grito de dolor y oigo las botas de Harry contra el piso de madera.
-Harryy. -Grito y el rápidamente entra en mi habitación y literalmente corre hasta mi cama.
-Que ocurre barbara?. -Dice con una mirada de angustia.
-Harry, es mi... AAAHH. -Grito. -Por favor, llevame al doctor, no puedo mover mi pierna... y el dolor en mi cadera me esta matando. -digo entre gritos y lágrimas.
Harry rápidamente quita las sabanas que cubren mis piernas y sus ojos se abren al ver que solo llevo una camiseta puesta, se dirije a mi armario rápidamente y busca unos pantalones de pijama, unos jeans y unas botas, toma un bolso en mi perchero y mete los jeans y las botas y deja los pantalones de pijama afuera.
-Te ayudare a ponertelos. -Dice y toma una de mis piernas con cuidado.
-No Harry, vámonos ya. -No puedo aguantar un maldito minuto mas.
-Solo sera un momento. -Desliza el pantalón por la pierna que duele menos, y grito cuando toma mi otra pierna y la levanta un poco, desliza el pantalón rápidamente y con ayuda de mis manos me apoyo para levantar mis caderas y el termina de poner el pantalón, dolió como el infierno cuando levante mis caderas. Harry me levanta en sus brazos y baja las escaleras rápidamente, salimos de casa y el me deja en el asiento del copiloto mientras corre para subir al asiento del conductor, lanza el bolso en la parte de atrás y enciende el auto. Conduce rápidamente y se salta un par de cemaforos en rojo, algo me dice que mañana tendrá unas cuantas infracciones de transito en su buzón. Me quejo de dolor durante todo el camino hasta que por fin llegamos, Harry estaciona rápidamente, apaga el motor y se baja del auto para ayudar a salir, cuando va llegando a la entrada un enfermero viene rápidamente con una silla de ruedas, Harry me ayuda a sentarme y el enfermero me lleva al área de emergencias, me suben a una camilla, el enfermero me hace una serie de preguntas y yo con dificultad respondo.
-Le pondremos un calmante a su novia para el dolor y luego la llevaremos a rayos x. -Le oigo decir. El enfermero se marcha y Harry me toma de la mano.
-Ya te van a poner un calmante para el dolor, -Dice y yo asiento, Harry acaricia mi cabello y mi rostro lo cual me ayuda a no pensar en el dolor, el es mucho mejor que cualquier calmante del mundo.