Cuando cruzamos miradas para ti fue algo sin importancia, pero para mí, que en ese momento ya estaba completamente rendida a tus pies fue una explosión de sentimientos, sentía mi corazón correr la carrera más larga de su vida, sentía que estaba cálido mi pecho, incluso sentí las dichosas mariposas en mi estómago, recuerdo que ese día pensé que estaba enferma y corrí fuera de la cafetería yendo al baño.
Mis amigas fueron detrás de mí con botellas de agua en mano, pero cuando no te ví todo malestar había pasado, me sentí patética, pasaron unos cuantos días, nuestros "encuentros" eran cada vez más frecuentes, no creía que era cosa de casualidad, pero yo tampoco los provocaba, decidí aprovecharme de ellos y verte en silencio todos los días, cada vez a mis ojos eras la persona más preciosa y maravillosa.Amaba verte en tus entrenamientos, amaba verte reír a carcajadas junto a Yeonjun y Soobin. Llegue incluso a enamorarme de la manera en como juegas con tu lápiz mientras prestas atención a las clases, cómo haces apuntes rápidos pero elegantes, también me enmaravillé con tu manera de alzar la mano y confundir a los maestros con tu insaciable curiosidad con los temas expuestos. Me enamoré de ti.
Sin siquiera notarlo, estaba enamoradísima de tus diferentes sonrisas, la traviesa que venía acompañada con un grito del maestro de biología, la encantadora donde la maestra de lógica te perdonaba el retraso, la divertida que venía junto a una melodiosa carcajada, la galante que iba dirigida a las jóvenes que te miraban entrenar (lástima que nunca miraste a la escaleras para dirigirme una).
Cuando me preguntaron mis amigas a quien miraba, siempre evitaba contestar huyendo de sus miradas, no pasó mucho tiempo cuando se dieron cuenta, ellas siempre se burlaban de mí por estar mirándote. Pero en una noche donde solo estábamos las cinco me miraron y me pidieron describirte.
Mi contestación fue algo tonta, pero decir todo en palabras es difícil, contesté: Él es simplemente perfecto a mis ojos. Ellas gritaron enamoradas pero eso no era todo, porque aunque eres perfecto a mis ojos, incluso perfecto se queda corto, verte hace que dentro de mí surja una tormenta de emociones y sentimientos desconocidos, sacas mi lado más tonto, al desear abrazarte y cuidarte.Incluso en éste momento, solo estoy deseando esconderte bajo una burbuja y evitar que alguien te lastime, porque eres un ángel, un angel que simplemente merece todo lo bello que existe del mundo, un ángel que no merezco.
Pero sigo siendo egoísta y no pienso quedarme con los brazos cruzados sin decirte mis sentimientos, lástima que no me atrevo a decírtelo de frente, ésta carta es solo un medio para expresar todo de mí, pero ahora con la pluma en mano y miles de hojas regadas en el suelo, ni siquiera aquí puedo expresarme, no puedo simplemente decir todo de mí, porque estos sentimientos son desconocidos, son más que un "me gustas", más que un "me encantas". Son tan difíciles.
HueningKai, eres extremadamente cruel. Me enamoraste hasta punto de que siento que me estoy ahogando cuando me miras y me guiñas. ¿No puedes ver todo lo que siento por ti? ¿No puedes ver qué me tienes a tus pies?
Atte: Yuna.
Kai sintió su corazón cálido después de leer la carta misteriosa, aún con más de cien cartas en su pupitre, solo había buscado la de una persona, se había sentido decepcionado al no encontrarla, pero debajo de varios regalos ahí estaba y a su lado el paquete de chocolates que tanto le gustaban. Dirigió su mirada a la joven que aún mantenía sus mejillas rojas y sonrió aún más grande.
Siendo catorce de febrero, toda la preparatoria estaba hecha un caos, todos mandando flores y regalos, ya sea con los jóvenes repartidores o las mismas personas valientes que se atrevían.
Él, él era un valiente cobarde que había preparado una sorpresa para la joven que le había dedicado tan hermosa carta. Porque él, él también había caído en las disimuladas miradas de la joven, y también la había observado, le había mirado bailar y cantar pensando que estaba sola en el aula de artes. Y la había escuchado gritar en la azotea un "Enamoradísima de HueningKai" mientras él dormía escondido. Debe admitir que en ese momento su corazón inició la carrera más animada que había tenido.
Miró a Soobin asomar su cabeza y detrás de él, YeonJun sonreía, era la hora, se levantó y al segundo se arrepintió cuando miró las cartas y regalos caerse, aclaró su garganta acomodando todo de la mejor manera posible y después nuevamente se colocó frente a toda la clases.
—Eeh, quiero declararme a alguien— habló fuerte mirando la cara emocionada de varias chicas y se sintió mal al tener que romper tantos corazones.
—No sé cómo iniciar, pero me gustas desde hace mucho tiempo, y nuestros encuentros no fueron casualidades, no porque tú desayunas en la cafetería del oeste junto a tus amigas mientras yo en la cafetería del este junto a los chicos de fútbol, pero logré convencerlos para que desayunáramos ahí, tampoco era casualidad que yo fuera a estudiar a las 7:00pm a la biblioteca cuando ya solo quedan pocas personas ahí— mientras hablaba se acercaba a la joven, está abría los ojos con sorpresa y mantenía agarrada la mano de Lia mientras la apretaba en emoción— Lia.— algo dentro de ella se rompió— ¿Puedes moverte para preguntarle a Yuna si quiere ser mi novia?— y la primer mencionada se alejó escapando del agarre de su amiga, mientras que ésta aún tenía los ojos y boca abierta de la sorpresa— ¿Quieres ser mi novia?— preguntó mientras que SooBin le extendía un plumón y mostraba un pizarrón pequeño con aquella pregunta, al lado de Kai, Yeonjun extendía un ramo de rosas.
—¡Sí!— exclamó contestando en el pizarrón y después abrazar al joven de cabellos castaños que sonreía galante a ella.
—Mis sonrisas galantes, siempre fueron para la joven que se escondía en las escaleras de las gradas.