i. the thing

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I. LA COSA

RESULTA QUE A LILO LE GUSTABA IMAGINAR.

Bueno, estoy segura de que ella lo llamaría ''investigar mundos paralelos posibles'' para no verse tan tonta.

A Lilo, como a la mayoría de gente que no le gusta su vida, le gustaba imaginar como sería si las cosas fueran diferentes: si no hubiera sido practicamente obligada a vivir en Europa, si su hermana no fuera un sinónimo insoportable de la perfección y, principalmente, si sus padres no estuvieran muertos.

Bueno, no sabía si lo último tanto, porque aunque sus padres siempre se mostraban muy amables (según palabras de Nani) también podían llegar a ser bastante hipócritas (según sus propias conclusiones).

Estaba segura de que, si ellos hubieran estado vivos como para al menos poder saber la casa en la que había quedado, estarían bastante enojados (y decepcionados) en su interior, aunque tal vez ni siquiera lo dijeran, y la hipocresía se debía a lo mismo. Porque, siendo ellos tan poco humildes a veces, que llegaran a ofenderse porque ella fuera exactamente como ellos le resultaba bastante hipócrita.

Pero, en realidad eran solo pensamientos de Lilo, nunca sabría si aquellas cosas podrían llegar a ser verdad.

Y, siguiendo con otras cosas, aquella vez era viernes, que a Lilo no le desagradaba tanto, porque significaba que al día siguiente no tendría clases, algo beneficioso que significaba que podría quedarse en su cuarto haciendo estupideces todo el día, o ir a la biblioteca solo por la simple razón de no sentirse tan sola como cuando miraba a su alrededor en la sala común, porque nadie iba un sábado o un viernes a la biblioteca.

Pero, sus planes se verían horriblemente interrumpidos, sin saberlo.

Resulta también, que la pelinegra caminaba hacia el bosque prohibido para su clase de Criaturas Mágicas (no era tan malo, pero el profesor parecía bastante estúpido) junto con el resto de Slytherins de tercer año, y donde también estarían los de Gryffindor (lo que si era muy malo).

De igual manera, iba concentrada mirando a sus pies, contando los pasos hasta el lugar por el simple aburrimiento de no desagradarle sus propios pensamientos, tratando de concentrarse en algo más.

Confesión del día: al darse cuenta de que el silencio predominaba decidió levantar la vista, dándose cuenta de que ni siquiera estaba con los de su grupo.

Por un momento, se mantuvo tan impasible con respecto a estar tan distraída de salirse de su rumbo, porque sabía que seguramente no había ido tan lejos como para que le costara volver, hasta que, llamando la atención de sus ojos curiosos, se encontró con una especie de destello de luz azul proveniente de algún lado, y, siguiendo el camino por donde en cada paso la luz se hacía más y más fuerte, se encontró con un gran pedazo de chatarra.

Segunda confesión estúpida del día: se sintió bastante decepcionada.

Creyó que, por el pequeño escalofrío que tuvo en su espalda en el momento de presenciar el primer destello, podría ser algo impresionante, algo que incluso podría cambiar su monótona y aburrida vida, y la decepción fue bastante grande al darse cuenta de que era solo un pedazo de metal gigante.

Parecía una especie de cápsula o algo así (no estaba cien por ciento familiarizada con ese tipo de objetos seguramente muggles) y estaba abollada en la mayoría de sus lados, lo que seguro era consecuencia de una caída de alto impacto.

Primero que nada, se preguntó por qué una cosa como esa estaría en algún lugar de Hogwarts, y luego se cuestionó porque habría sido la única que vio aquella extraña luz que desprendía, o si siquiera había sido la única.

Pero, antes de que pudiera hacer más conjeturas, o siquiera quedarse a darse cuenta de que la cápsula había comenzado a brillar con más intensidad, el pedazo de chatarra explotó, haciendola tratar de retroceder lo más rápido posible, cayéndose en la tierra y el pasto.

El ruido había sido lo suficientemente estridente como para que enseguida tuviera a una multitud de personas a su alrededor preguntándose que había pasado, pero aquello no sucedió, no había nadie más que ella.

Se atrevió a preguntarse a si misma si podría haberlo inaginado, o si siquiera seguía dormida.

Y al mirar hacia atrás, con los oídos aún zumbando, notó que, en realidad, no estaba sola: una persona estaba atrapada entre los escombros de la cápsula, y, lo peor de todo, es que estaba desnuda.

LILO & STITCH [HARRY POTTER SERIES]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora