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El empezar de un nuevo día

Will y Olivia se habían dormido finalmente, rompiendo en pedazos la ilusión de quedarse despiertos toda la noche para poder charlar. Al fin y al cabo, estaban muy cansados, y probablemente no lo hubiesen conseguido nunca... Así pues, se había hecho de día.

Los rayos de sol traspasaban las blancas cortinas de la habitación, los cuales al final consiguieron despertar a Olivia en menos de cinco minutos. La joven se las arregló para levantarse de la cama sin despertar a Will, y una vez de pie, se estiró, intentando no hacer mucho ruido, lo cual fue en vano, pues al volverse hacia el muchacho, éste la miraba con sus grandes ojos abiertos de par en par.

-¿Cómo demonios te has despertado?- preguntó en un susurro Olivia, frunciendo el ceño.- Apenas he hecho ruido...
-Llevo despierto desde hace un rato.- respondió, encogiéndose de hombros. Un par de segundos después ya estaba de pie, y los dos se disponían a bajar a la planta inferior. No sabían exactamente qué hora era, pero rezaban para que fuese pronto, pues si alguien se despertaba antes que ellos, y veía que Will no estaba en la habitación de invitados...

Olivia abrió la puerta lentamente, dejando paso a Will (el cual había dormido con traje). Olivia cerró la puerta al salir después de él. La muchacha había dormido con su vestido de fiesta.
Bajaron las escaleras de puntillas, y al poner un pie en el suelo, los dos se sobresaltaron al ser empujados por alguien al salón. En cuanto abrieron los ojos, vieron que eran Rachel y Jeff... Y Ruth y Sophie. Las dos parejas estaban frente a ellos, mirándolos de arriba a abajo.

-Bueno, ahora podemos confirmar la teoría de que nadie ha dormido en la habitación de invitados.- espetó Rachel, poniendo los ojos en blanco.
-¿Hay alguien despierto?- preguntó Olivia.- ¿Alguien se ha dado cuenta de...?
-Son las seis de la mañana.- Ruth cortó a Olivia en la mitad de su frase.- Y no, nadie se había dado cuenta, así que vamos a elaborar un plan para que siga así, ¿de acuerdo?
-¿Qué plan hay que elaborar? Decimos que nos hemos despertado pronto, cada uno en su respectiva habitación, y ya hemos bajado.- dijo Rachel. Ruth se volvió hacia ella incrédula.
-¡Era una forma de hablar, Rachel!
-¿Qué es todo este ruido, eh?

Todos se volvieron hacia las escaleras; la señora Brown estaba de pie junto a ellas, y les acababa de alzar la voz. Llevaba puesta una bata de color malva y un moño que le recogía toda su melena.
Will se volvió hacia Olivia, temblando, y con los ojos como platos. La muchacha le intentó tranquilizar con la mirada.

-¡Nos hemos despertado todos por nuestra cuenta, cada uno en nuestra respectiva habitación y hemos bajado!- exclamó Ruth, con una sonrisa incómoda dibujada en el rostro.
-No  literalmente, Ruth.- susurró Rachel, para que solo ella la escuchase. La muchacha puso los ojos en blanco.
-De... ¿acuerdo? Bueno, esperamos a que todos se levanten para desayunar, pues.- la señora Brown se encogió de hombros, desde la escalera.

                              •            •             •

La señora Brown, Ruth y Sophie, Rachel y Jeff, Olivia y Will, junto a Amy, Vicky y Lizzie estaban sentados en torno a la mesa de la cocina, aburridos de tanto esperar: Finn era el único que no había bajado las escaleras para desayunar, y la verdad es que ya estaban hartos.
Todos mantenían el silencio, hasta que Amy se levantó de un salto de su silla

-Se acabó.- exclamó, con las manos en la cintura.- Voy a levantarle yo misma.
-¿Y de verdad es necesario desayunar todos juntos?- añadió Rachel, suspirando.
-Sí, Rachel, es necesario: somos una familia, por el amor de Dios. Y Amy, si Finn no se levanta en un cuarto de hora podrás hacerlo.- Amy sonrió con malicia.
-Vaya, no recuerdo un solo día en el que Finn no madru...- Olivia se cortó a sí misma en medio de su frase; acababa de recordar que su hermano pequeño seguía en el armario, y no podía moverse ni hablar. La muchacha se volvió nerviosa hacia Will.- Tengo que ir al baño. Al de mi habitación. Will, ¿vienes?
-Eeeehheehh... C-claro.

Los dos muchachos se levantaron de sus sillas y caminaron en silencio hacia el exterior de la cocina. Una vez fuera, Olivia le refrescó la memoria a Will sobre Finn.

-¿Cómo no me he podido acordar antes?- susurró, para que nadie más aparte de Olivia le escuchase.- ¡Tenemos que sacarle, ahora!

Will y Olivia subieron las escaleras de dos en dos, para llegar todavía antes a su destino. Una vez en la planta superior, corrieron hacia la habitación de Olivia y abrieron la puerta con sigilo... En su interior todo estaba igual, nadie más había entrado allí... Olivia caminó de puntillas hacia el armario... Y dentro encontró a Finn, con los ojos abiertos como platos. Olivia y Will soltaron exhalaron, un aire que ni siquiera sabían que retenían.
Olivia deshizo su encanto sobre su hermano; Finn comenzó a corree por toda la habitación, y gritando. La muchacha lo alcanzó y le dijo que se callara.

-Vamos a bajarle antes de que alguien suba.- espetó Will, susurrando sin darse cuenta.
-Sí, vamos.

Olivia cogió a Finn del antebrazo y siguió a Will por las escaleras. Todo estaba en silencio... Un silencio sepulcral que los hacía temblar...

-¡Ey, mira, Finn se he levantado!- exclamó Olivia, soltando a su hermano delante del resto de su familia.
Finn tenía el ceño fruncido.
-¿Se puede saber por qué te has levantado tan tarde, jovencito?- preguntó la señora Brown.
-¡Olivia me ha encerrado en un armario durante toda la noche y no podía salir! ¡Me encerró porque... ella...!- Finn juntó las palmas de sus manos lentamente, reflejando en su expresión repulsión.- ¡Sí... eso... con Will! ¡Y no quería que lo contase!
Olivia fingió reírse.
-¡Oh, Finn, eres muy gracioso! ¿De dónde sacas esas historias, eh?
-¡No estoy mintiendo!- gritó Finn- ¡Y lo sabes!
Olivia bajó la mirada al suelo.
-Eeeeehhhh...- murmuró la joven, comenzando a sudar frío.

¡Holaaa!
Hace mil que no actualizo, y este libro parece que está medio muerto o algo, pero aquí está, después de casi 4 meses. ¡Espero que os guste!❤️

Byeeee💗