La respuesta

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Pov Natsu.

¡Lo dije! Sentía que iba a explotar de nervios. Lucy me miraba impaciente como si no se creyera lo que había dicho. Pensé que todo se había ido a la mierda, que el plan de conquistarla sería inútil ahora que le había confesado lo que sentía.

- Natsu yo...

- ¡Natsu! ¡Lucy! - ese era Happy que aparecía volando através de la ventana.

- ¡Happy! ¿Cómo te fue en la misión? - pregunto Lucy incapaz de mirarme a los ojos.

- ¡Bien! Todo lo hizo Wendy a mejorado mucho como maga - reconoció Happy - ¿Podemos ir a casa, Natsu? Traje unas cosas estupendas de la misión y quiero que las veas.

Por una parte no me quería ir con Happy, quería saber la respuesta de Lucy. Por otra parte había pasado muy poco tiempo con Happy que tenía miedo de que otra persona que amaba se sintiera solo por mi culpa.

- Vamos, Happy - me pare de su cama y me apoye en la venta para salir - Piénsalo Lucy... Yo voy encerio - le murmuré.

Sin más nos dirigimos a la casa con Happy. Sentía una presión en el pecho. Lo único en lo que pensaba es en que lo había arruinado todo ¿En qué estaba pensando? Mi plan era conquistar a Lucy no decirle lo que sentía así sin más. Pero lo del chico nuevo y él viviendo justo al lado me ponía incómodo. Ya el intento de Dragon Slayer había dicho que le interesaba Lucy.

- Estás muy callado, Natsu ¿Te sucede algo?- me pregunto Happy.

- Estoy preocupado por Lucy - le confesé.

- Debido a que la dejaste sola un año... - dijo Happy.

Genial, todos se dieron cuenta de eso menos yo. Quería arreglar eso.

Llegando a la casa en el bosque. Vimos las cosas que trajo mi compañero azúl, eran cosas muy útiles ya que planeabamos arreglar el casa para el invierno, estaba muy descuidada desde que la dejamos hace un año.

Llegando la noche no podía pegar el ojo. Pensaba en Lucy, quería saber ya su respuesta me moría de ganas. Caminar me hará calmarme. Saliendo de la casa decidí ir a la plaza de Magnolia para caminar por ese lugar.

Por más que lo pensaba se me venía a la mente la probabilidad de que Lucy no sienta lo mismo que yo y que jamás lo hará. Jamás me puse a pensar en que haría si Lucy no me quería ¿Seguiría con mi vida? ¿Seguiríamos siendo amigos? ¡Maldición! Hace poco más de dos años solo me preocupaba luchar, encontrar a Igneel y ser más fuerte que los demás. Pero eso cambió con la muerte de mi padre y la guerra con Zeref... Ahora solo quiero vivir en paz y proteger a los míos. Esa mentalidad era la de un adulto, ya no era más un niño...

Sin darme cuenta estaba frente al edificio donde vive Lucy, sonreí, incontables noches en el pasado daba paseos nocturnos y terminada justo aquí. Tenía unas ganas inmensas de entrar por esa ventana y mirarla dormir, creo que yo siempre estuve enamorado de ella pero era muy inmaduro para notarlo.

Subo a su ventana y la abro cuidadosamente sin despertarla. Pero para mí sorpresa ella se encontraba despierta.

- Natsu...

- ehmm... Pensé que estarías durmiendo - admiti.

- No puedo dormir... Parece que no soy la única - dijo ella.

- Tenemos que hablar, Lucy - ¡Mierda! Estoy tan nervioso.

-¿Sobre lo que dijiste está tarde? - Lucy de veía tan linda sonrojada.

- Si...

- ¿Es todo verdad lo que dijiste, Natsu? ¿O Fue el calor del momento? - pregunto Lucy.

- Todo verdad, Lucy. Sabes que jamás te mentiría... Menos con eso - fuí sincero con ella.

- Yo pensé que me veías solo como una amiga y que sólo yo te veía como algo más. Jamás pensé que en tan poco tiempo te convertirias en el hombre maduro y comprensivo y que me quiere...

- ¿Tú me quieres, Lucy? - la pregunta definitiva. No sé si quiero escuchar la respuesta.

Ella solo asiente... Me basta con eso. Me quiere como yo la quiero a ella, no puedo evitar sonreír. Quiero besarla pero no sé si sea el momento. Lucy se me adelanta y me besa, pone sus brazos alrededor de mi cuello para profundizar el beso. Yo con gusto le correspondo. Sabe tan bien... Las cosas se ponen algo subidas de temperatura cuando pongo mis manos en su cadera y profundizo más el beso saboreandola con mi lengua, Lucy en vez de pararme gime a mí tacto, al escuchar eso todo pensamiento cuerdo se me van de la mente y me abalanzó más y ya estoy encima de ella y Lucy abre más sus piernas para estar más cerca, grita de placer al sentir mí erección en su entrada.

- Lucy... Debemos parar - le digo con la voz entrecortada.

- Perdón no estaba pensando claramente - admite Lucy. Sonrío aún más.

- Creo que ya debo irme... Mañana tenemos que ir a la misión - le recuerdo. Hasta yo me había olvidado. 

- Hasta mañana Lucy. Te quiero - le digo apoyándome en la ventana.

- Te quiero Natsu ...

Te Amo LucyDonde viven las historias. Descúbrelo ahora