Nuez de Adán ;; Emiliaco

Reconciliación.

Antes de empezar quisiera decirles que me pone un poco triste que un capítulo de más de 300 lecturas a duras penas llegue a 40 votos): la neta sí me desmotiva un poco, así que, si votan se los agradecería millones, ahora sí, disfruten.

Joaquin había pensado en pedirle a Emily que se mudará con él antes de que todos llegaran pero apenas llegó se puso a cocinar pizzas y lo obligó a que acomodara un poco el living, él lo hizo porque siempre obedecía a su novia y porque pensó que quizás sería mejor que se lo preguntara luego, aunque estaba muy ansioso y nervioso y seguro algo le saldría mal si lo hacía a las apuradas.

Él terminó lo que debía hacer rápido, aunque no lo hizo del todo bien, ya que solo acomodó un poco el sillón, sacando la ropa que tenía ahí tirada, el suelo porque lo barrió rápido, y la mesa de café, de la cual sacó las cosas que estaban de más en ella y las llevó a su habitación donde las dejó tiradas en el suelo cerca de su cama, éstas cosas eran papeles de su trabajo y folletos que le daban en la calle y él tiraba en cualquier lado dentro de su casa cuando entraba luego.

Cuando dejó el living y llegó hasta la cocina, luego de haberlo acomodado un poco, Joaco se acercó a su novia y la abrazó por detrás, rodeando su cintura con sus brazos y dejando dulces besos en la parte trasera de su cuello, ella estaba cortando tomate para hacer la salsa de las pizzas cuando entró a la cocina, y se quejó levemente, soltando un gruñido, cuando Joaquin la tomó de la cintura y la acercó así.

Ella debía cocinar varias pizzas para los amigos de ambos que vendrían y no necesitaba una distracción como lo era en ese momento la erección de Joaquin, que se encontraba presionando contra su voluptuoso trasero.
Así que sonriendo ligeramente se alejó del rizado, caminando hacía las masas medias cocinadas, que ya había preparado y había dejado en la mesa, para colocarle la salsa.

Joaco quiso protestar pero el sonido del timbre lo interrumpió, bufando caminó hacía el intercomunicador, preguntó quién era, luego de levantar el tubo y posicionarlo contra su oído, Nikolas le contestó que era él y que venía con Eduardo. El rizado apretó un botón en el aparato para abrir la puerta del edificio, lo hizo y se alejó del living para volver hacía su novia.

-Bebé, llegó Niko con Edu. -Le comentó Joaquin cuando estuvo cerca de la castaña.

-Genial, mantenlos en el living hasta que termine las pizzas. -Le contestó de vuelta con una sonrisa y le besó la mejilla antes de volver a su labor.

Él quiso volverse y besarla bien y en los labios pero el sonido del timbre lo interrumpió nuevamente, éste le advirtió que Nikolas y Eduardo ya habían llegado a la puerta de su departamento, se dirigió a ésta y la abrió.

-Hey. -Saludó Niko alegremente y lo abrazó por el cuello, luego besó su mejilla y entró en su departamento.
Joaco rio por ello y también los saludó con un "hola". Atrás del rubio se encontraba su novio Eduardo, éste le saludó también y entró con una sonrisa no muy sincera en sus labios pero bueno, él no podía culparlo, lo había mirado mal por un tiempo largo en el que no había aceptado que su amigo sea homosexual. Ahora lo aceptaba, no tanto pero lo hacía.

El rizado cerró la puerta y se sentó en un sillón de su living, conversando con la pareja, Niko se había sentado en el regazo de Eduardo y Emily estaba en el suyo pero no lo estuvo todo el tiempo ya que se sentó cuando acabó de colocar todas las pizzas en el horno.

A los treinta minutos de conversación las pizzas ya estuvieron listas y el timbre había sonado dos veces más, en esas dos veces habían llegados más amigos, con los que se había distanciado cuando se había peleado con Nikolas: Ian, Polo y Santiago.

Todos se sentaron en los sillones o sino en sillas, Emily lo hizo en su regazo luego de servir las pizzas en la mesa de café y acomodar unos vasos, sus amigos habían llevado cerveza, así que eso era lo que tomaban. Todos se mantuvieron contando lo importante que habían hecho en el tiempo y conversando sobre otras cosas, hasta que se escuchó nuevamente el sonido del timbre, Emi fue quien atendió el intercomunicador, como ella se había quedado un rato hablando por éste Joaquin supuso que era Diego, gruñó para sus adentros y se acercó a la castaña. La tomó por detrás de la cintura y dejo besos por su nuca y por la piel de su espalda que dejaba descubierta el vestido que llevaba puesto.

Ella reía por sus caricias mientras hablaba, Joaquin suponía que ella sabía que él estaba celoso.
Emily dejo el tubo del teléfono y apretó el botón para que Diego y su novio pudieran subir al departamento, Joaco seguía besando la parte trasera de su cuello, por lo tanto cuando ella se dio vuelta para quedar frente a él quedó con los brazos del rizado envolviéndola. Joaquin continuó besándola pero ahora que la tenía de frente, sus besos iban hacía su cuello y clavículas.

-Bebé, basta. -Murmuró la castaña, riendo suavemente por los besos que le daba el rizado. Éste negó con la cabeza mientras subía sus besos por las mejillas de la castaña hasta sus labios, sobre estos murmuró "mía, mía, mía", a la vez que dejaba varios besos sobre estos.

El rizado rió sobre los labios de la castaña cuando escuchó un sonido como "aw" provenir de su rubio amigo, y a los segundos sintió los brazos de éste envolverse en ambos: Emily y él. Pero ello no duró mucho porque Eduardo se acercó a ellos y tomó por la cintura a Niko, tirándolo hacía atrás.

-Amor, déjalos. -Casi gritó divertido el castaño, a la vez que reía. El rubio le hizo caso de mala gana.

Los cuatros rieron hasta que se escuchó el sonido del timbre, Joaco soltó a su novia y fue hasta la puerta, la abrió y detrás se encontró con Diego, la sonrisa que el rizado llevaba desapareció y fue reemplazada por otra media falsa.

-Hola, Diego. -El mencionado le contesto de vuelta y Joaquin se hizo a un lado para dejarlo pasar, abriendo más la puerta, cuando el morocho cruzó la puerta, Joaco pudo ver que venía de la mano con Mau, frunció el ceño y ladeó un poco la cabeza.

-¿Mau? -Preguntó confundido. -¿No era que Diego iba a venir con su novio?

-Sí, Joaco, por eso estoy yo aquí. -Le contestó divertido el castaño, mientras también se adentraba en la habitación.

Dejando a Joaquin con la puerta abierta confundido y todavía en shock, aunque eso solo fue hasta que su novia se le acercó riendo.

-Vamos, bebé. -Le susurró cerca de los labios y lo besó, con un simple roce de labios únicamente.

Si ven un error, háganmelo saber, este cap no lo revisé bien, ya que lo hice a las apuradas.
Les ama

Ann.🌈