33. Fantasma de la chica que solía ser.

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Joely:

Sigo aquí, siendo el fantasma de la chica que solía ser. Mi vida es pura monotonía, despertar, ir a clases, ir a la casa de Mery, esperar noticias y regresar a casa a dormir. Ya ha pasado un mes pero sigo teniendo esperanzas que Thomas sigue vivo, en algún lugar. Hoy hace un mes me encontraba en un karaoke y al otro instante siendo trasladada a una clínica, me dijeron que tenía un grado de desnutrición grave y me preguntaron  si sufría de trastornos alimenticios, lo negué porque en realidad no pasaba por eso, debo decir que no he mejorado mucho debido a la ausencia de Thomas y es que sin él todo es más difícil incluso lo que aparentemente es fácil.

No estoy acostumbrada a una vida sin él, sentí que mi mundo se derrumbó desde que supo lo del accidente de su avión, siempre dije no no podía sobrevivir a lo que pasé, el dolor es demasiado grande, siento que cada día me carcome la ansiedad, la desesperación y hasta la ilusión de que vuelva me llega a lastimar. Me han dicho que lo supere, que ya deje atrás todo, pero no puedo. No puedo dejar atrás a la persona que amé, que amo porque siento que sigue en mi piel, siento que él está en cada espacio de mi ser. 

Cada día es un dolor nuevo, recuerdos, fotos, el pasar de los días, no concibo dejar de pensarlo de imaginar que fue de él en ese accidente. Dentro de mí el sigue vivo, lo puedo sentir. He tratado de alimentarme más para que mi salud no se deteriore pero todo lo que hago es en vano porque en las consultas médicas me dicen que no hay progreso alguno en mi situación. Supongo que llegó un punto en el que ya no depende de mi, aunque todos piensan que sí. 

Mi madre está igual de mal que yo, pienso que mi estado de ánimo y salud no ayudan a que ella siga como antes, esta situación me afecta más ya que me he encerrado en mi propia búrbuja, sufriendo yo sola y no me daba cuenta que a mi alrededor las personas estaban igual o peor quie yo. Me centro en mi dolor y no dejo que nadie me ayude, me conformo por querer que mi familia y la de Thomas se sientan bien, lo que no saben es que sigo llorando cada noche hasta quedarme dormida y me despierto al día siguiente como fingiendo ser fuerte a pesar de mi debilidad.

Con él se fue todo de mi, me acostumbré tanto a tenerlo que no me hallo sin estar a su lado y es que él era lo más bonito que tenía aparte de mi familia, nosotros ya teníamos planeado un futuro que aparentemente quedó destruido desde el momento en que su avión cayera y explotara. 

Todos me dicen que estoy joven y que puedo encontrar a alguien más pero es que yo no necesito a alguien más porque seguiré esperando que vuelva. Puede que sea idiota por esperar algo así, pero amor es algo idiota y yo por él soy capaz de todo.

Hay noches en las que lloro y no puedo dormir imaginando como sería verlo entrar nuevamente por mi ventana y acostarse a mi lado, pensando como sería tenerlo nuevamente a mi lado. 

Es hora de ir a la universidad así que me doy una ducha rápida y me visto como siempre, un jean, una camiseta suelta, mis vans y llevo una chaqueta porque en mi universidad siempre hace un frío del demonio. Parece un día normal si no estuviera con mi constante depresión, he llegado a un punto en el que he apartado a muchos de mis amigos a exceptión de Mery, Hristo y Jacaqueline. 

Ahora conduzco de camino a la uni, por estar inmersa en mis pensamientos casi atropello a un chico, él sólo se quedo perplejo frente a mi coche. 

RESET: ¿Y si nos volvemos a encontrar?Donde viven las historias. Descúbrelo ahora