Los cuidado del tío

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-Valeria mi niña pórtate bien, se educada con el tío Josue.Tu padre y yo confiamos en ti.
-Vamos querida es Valeria, todo va a estar bien.Un beso mi niña, Josue ,ojos al Romeo.
-Papá! -Exclamó apenada Valeria.
-No se preocupen por nada- Se reía y despedía agitando un adiós el tío.
Cierra la puerta y se voltea a mirar a valeria, le pone la mano en el hombro y le dice: -Tranquila, los padres siempre exageran- Se reía el tío, Valeria se sonroja y se va a su habitación.
Mientras se retiraba su tío la miraba. Nuestra chica tenia 16 años de edad ,pelo rizado, ojos claros, muy linda figura, estudiosa, aplicada y educada.
Esa noche el tío prepara la cena mientras Valeria se encontraba en su habitación estudiando.
-La cena esta lista -dijo el tío mientras tocaba la puerta de la habitación.
-Ya voy tío - Abría Valeria la puerta y choca con Josue.
-Oh perdona fue mi culpa.
-No pasa nada mi niña - Le sonrió mientras la miraba de abajo arriba.
Se sentaron los dos a la mesa, Valeria era una chica de pocas palabras y tímida, por eso practicamente solo hablaba su tío. Le preguntaba sobre la escuela pero el mismo se respondía ya que Valeria solo afirmaba con la cabeza, pero hubo una pregunta a la que si contesto con palabras.
-Entonces este tal Romeo eh- Exclama el tío entre risas.
Se sonroja y responde —No se llama Romeo se llama Arthur y estudia conmigo en la escuela.
El tío fruñir el ceño y dice — Con que novio. 
Valeria se esconde en sus hombros y dice que son solo amigos .Al terminar la cena, recoge todos los platos y cubiertos y va hasta la cocina, Josue desde el comedor se queda observándola.
-Me voy a la cama, que tengas buenas noches tío.
-Tú también cariño, tú también.
A la media noche se abre lentamente la puerta del cuarto de Valeria, estaba dormida profundamente, hasta que la mano de su tío tapándole la boca, la despierta, ella abre sus ojos muy asutada.
-Sh tranquila -  le dice su tío bajito con un cuchillo apuntando al cuello de Valeria -Tranquila soy yo, no te voy hacer daño.
El cuerpo de Valeria tiembla de horror, no sabe que hacer, no puede moverse, no puede respirar, no puede hablar, esta en un total shock, -¡Es mi tio! ¿Cómo?¿Por qué me está haciendo esto?
Josue empieza a oler el pelo de Valeria, empieza a lamer y besar la parte del cuello donde no esta puesto su cuchillo.
-Ahora voy atarte, pero no grites, tranquila, estoy aquí contigo.
Valeria sigue impactada, sus manos están atadas y su tío corta su ropa dormir con el cuchillo, exponiendo sus pechos, una lágrima corre en el rostro de Valeria, nunca había mostrado su desnudez a nadie. Su tío lame su cara borrando con la lengua esa lágrima
-Tranquila, tío esta aquí contigo- Le sigue repitiendo.
Lame sus pechos, muerde sus pezones y empieza a bajar muy lentamente con su lengua recorriendo el cuerpo virgen de Valeria, lame su ombligo, besa su vagina por encima de su blumer, se levanta y corta su ropa interior con el cuchillo. Se mete un dedo a la boca y luego lo introduce dentro de Valeria mientras se acuesta sobre ella buscando con su lengua el cuello de la joven. Valeria no gritaba, no lloraba , solo miraba fijo al techo con la mente en blanco. En cuanto a su tío vuelve a bajar recorriendo su cuerpo esta vez con la punta del cuchillo rozando su piel. Mete su cabeza entre las piernas de Valeria, buscando con su lengua el clítoris, mientras le introduce dos dedos, levanta la cabeza eleva su cuerpo y se desabrocha el pantalón. Se tiende encima de Valeria y empieza a follarla, con una mano jala el pelo de Valeria haciendo inclinar su cabeza y con la otra mano sostiene el cuchillo que apunta al cuello incando muy levemente en ella. Al terminar se acerca a ella le amordaza la boca y le da un beso en la mejilla, se retira d la habitación y Valeria empieza a llorar.
Al dia siguiente tocan el timbre de la puerta, al abrir Josue se encuentra con un chico joven vestido de uniforme.
-Buenos días señor, vengo por Valeria para ir a la escuela.
-No, no - Responde nervioso el tío - Ella no va asistir a la escuela.
-No, pero,¿Por qué?- dice preocupado Arthur.
-Eh eh , está enferma. Adiós.
Cierra la puerta Josue y no da más explicaciones. Se dirige a la cocina y prepara el desayuno, lleva el desayuno a la habitación de Valeria.
-Buenos días, Valeria hija, te traje el desayuno - Valeria ni lo mira, él se sienta junto a ella en la cama, le quita la mordaza. Ella ve que en la bandeja junto a las tostadas se encuentra el cuchillo de anoche, pues no se atreve ni a respirar, el tío agarra las tostadas y se las da de comer, pero Valeria no abre la boca.
-Debes alimentarte, bueno dejaré esto en la mesilla de noche para cuando t decidas me llamas y te doy de comer - Vuelve a darle un beso en la mejilla y se encamina hacia la puerta.
-Tío — Con la voz temblorosa — Tú me vas a cuidar, ¿Verdad?
Josue gira y le responde con voz angelical — Claro mi vida- y se retira de la habitación.
Paso todo un día, cuando el tío vuelve a entrar en ese cuarto, camina lento hacia la cama, mordiéndose los labios con ojos de deseo. A su paso va acariciando con la mano desde el el pie hasta la cara a Valeria…
Suena el timbre d la casa.
-¿Quién sera a estas horas?- Josue abre la puerta. Era Arthur con unas rosas.
-Buenas noches señor,he traído estas rosas para Valeria.
-¡Largo! Te dije que está enferma.
Arthur no soporta el mandato y empuja a Josue dentro de la casa.
-¡Valeria , Valeria! Arthur corre hacia la habitación -¡Dios!- Exclama el muchacho al ver el estado de Valeria. Corre junto a la cama y la desata. El tío llega al cuarto y Arthur se vira y lo mira.
-¡Atrás! ¡Atrás, Monstruo!
-No lo creo - Le responde Josue.
Arthur corre hacia él y se le lanza encima. Ambos cuerpos chocan y caen al suelo, pero Arthur es joven y mas ágil , se pone de pie y agarra lo primero q tenía a mano, un búcaro, levanta su mano para atacar, y siente un escalofrío tremendo, seguido de un dolor enorme en la espalda. Cae el jarrón al suelo y cae Arthur también, justo detrás estaba Valeria con el cuchillo de su tío en la mano. Josue le dice:
-Calma querida soy yo, soy tu t..
-¡Cállate!- Le gritó Valeria, ahora era Josue quien estaba en el suelo tumbando, temblando de miedo y horror, Valeria camino lentamente hacia su tío, se subió sobre él, le puso el cuchillo en el cuello. Se acerco a su oído y le susurró:
-Fóllame que estoy muy caliente.
             Lázaro D. Vilches

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