🍼 𝑲𝑶𝑶𝑲 𝑭𝑳𝑨𝑽𝑶𝑹𝑬𝑫 𝑴𝑰𝑳𝑲 🍼

Se miro en el espejo orgulloso de como lucia con aquella blusa blanca que dejaba ver sus hombros, sus remarcadas clavículas junto con aquel choker rosa acompañado de un bello corazón de acero en medio y con esa rosa y diminuta falda; colocó por ultimo aquellas medias blancas de seda las cuales cubrían hasta la mitad de sus muslos dejando un poco de su blanquecina piel a la vista, la cual se notaba suave como cual terciopelo.

Porque si, Taehyung era un pequeño joven de apenas 18 años que encantado vestía ropa de chica.

Su cuerpo era esbelto y perfecto, podia lucir cualquier prenda a la perfección ya que su cuerpo no era nada marcado por los músculos peculiares de un hombre, al contrario el pequeño de rubia cabellera tenia el cuerpo delicado, con curvas en los lugares correctos y unos perfectos glúteos; algunos lugares resaltaban por ser rojizos como sus mejillas abultada y los labios que poseían el grueso perfecto para ser apetitosos.

Miro el rosa esmaltado de sus uñas y coloco sus tres pequeños anillos como ultimos accesorios, sonrió mirando el resultado final.

Recordó cuantas veces había estado parado con ropa un poco similar a la que llevaba puesta cuando decidía ir a ver a su lindo y sexy doctor Jungkookie.

Cruzó los dedos.

Quería que esta vez fuera perfecto y que no hubiera interrupciones, como esa vez que Jungkook ya estaba comenzando a caer y ese engendro de unos cinco años entro queriendo que su lindo doctor le diera una paletita o la vez que la mujer encargada de la limpieza interrumpio porque se le hacia tarde para sacar la basura, tanto que el rubio ya había perdido la cuenta de cuantas veces su plan había sido arruinado por completo.

Pero hoy se sentia con suerte, se soprendio cuando la asistente de su sexy doctor le dijo que seria el ultimo paciente de el día y sabia que no le costaría nada poder conseguir lo que anhelaba, la leche sabor a Kook.

Por que si.. Taehyung había probado todos los sabores de lechitas que podían existir y su favorito hasta ahora era la de vainilla.. Pero pronto cambiaria de parecer su favorita —si todo salia bien— seria la natural esencia de Jungkook.

Suspiró al ver su reloj de Hello Kitty en su escritorio, aun faltaban dos horas para su cita, se habia arreglado muy temprano, pero eso no le importo, así le daria tiempo de llegar más que puntual a su tan esperada noche. Pensó que seria mejor si llegaba temprano así Jungkook notaria que el pequeño rubio esperaba por el.

Se miro una ultima vez en el espejo y cuando comprobó que todo estuviera correcto sonrió para después morder su labio inferior.

Colocó sus tenis "Fila" blancos y se marchó.

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Cuando llego al consultorio aun faltaba casi 40 minutos para su cita, camino hasta la recepción donde se encontraba la secretaria de Jungkook, quien lo noto de inmediato y le sonrió amigablemente.

Si algo tenia el menor es que era un amor a simple vista y era inevitable no enamorarse de su bello, angelical e infantil rostro.

—Hola Tete.—El rubio se sonrojo por el reciente sobre nombre y sonrió tiernamente.—¿llegas temprano?

—Mmm..—Asintió en respuesta, mientras revoloteba sus pestañas.—no quería perder mi cita, así que llegue antes, esperaré sentado allí.—señalo la lujosa sala de espera.

—Oh, no es necesario, el doctor Jungkook esta esperandote, el paciente antes de ti cancelo asi que por ahora él esta libre.—Tae levanto una de sus cejas y sonriendo mordió el interior de su mejilla.—sigueme.