03/05/20

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A veces me hacía reflexionar a mí misma. Miraba a las personas desde un lugar oscuro, solo las observaba, veía cosas muy malas. A veces solo veía con mucho dolor, otras, con enojo, no voy a mentir, también suelo juzgar con rapidez, suelo decir cosas de manera apresurada, y está mal, pero, a diferencia de los demás, solo le decía lo que realmente pensaba a mi mente. Mis pensamientos, eran solo míos, de vez en cuando compartidos, y no voy a engañar a nadie diciendo que no me emocionaba. Pero si me dolía ver como a muchos les daba igual, y solo no decían nada, pero no es el tema.

Veía desde lejos, personas conocidas en el mundo con mucho dolor, personal malas, enojadas y dispuestas a vengar su dolor con quien se le cruzase en su camino.

Personas con grandes dolores motivada por la venganza, por el odio. Personas con grandes conocimientos usados incorrectamente. El mundo estaba lleno de ellos con más personas que los seguían.

A veces los juzgaba, no miento, pero siempre una voz de arriba me volvía a poner en reflexión continua, logrando que llegase a la comprensión.

Me era difícil amar sin motivos, me era difícil ver desde otra perspectiva a otras personas. Yo veía actos y palabras embarradas de dolor y odio, pero no veía el contexto, sabía que toda acción era una reacción de algo vivido anteriormente pero lo olvidaba. Hasta el momento en que salía de la comodidad de mi mente y pensaba en lo distintas que son las vidas 

Improvised wordsDonde viven las historias. Descúbrelo ahora