6.
Escuché un grito desde el cuarto, abrí la puerta de un golpe y le eché un vistazo a la habitación... ______ no estaba...
Miré hacia las ventanas del balcón, estaban abiertas.
Corrí hacia el balcón y miré a los lados.
- ¡Justin! -______ gritó.
Miré hacia abajo, ahí estaba ella, colgando.
- _______, como diablos llegaste ahi. -grité enojado.
Pasé un pie hacia la barra de donde estaba colgando ella, después pasé el otro y dejé mi mano sosteniendome del balcón.
- Toma mi mano. -le grité.
- No puedo Justin, caeré.
- No lo harás, confía en mi.
- Justin, ayudame por favor. -lágrimas corrían por sus mejillas.
- Toma mi mano, _______. -la miré fijamente.
Apretó los ojos y tomó mi mano. Apenas y la alcanzó a agarrar, ambos teníamos las manos mojadas, era dificil.
- ¡No me sueltes Justin! -gritó llorando.
La levanté con fuerza.
- Trata de poner tus pies en la barra. -le grité nervioso.
Sus pequeños y delgados pies temblorosos por el miedo trataron de ponerse en postura en la barra.
Sin soltar su mano pasé mis pies hacia el balcón.
- Ahora vas a dar pequeños pasos, ¿de acuerdo? -dije mirandola a los ojos- Yo estoy contigo...
Dio pasos diminutos hasta llegar al balcón.
- Agarra con todas tus fuerzas el barandal, no tengas miedo.
Volvió a apretar sus llorosos ojos y puso sus fragiles manos en el barandal.
- No te sueltes _______.
Asintió con la cabeza, miré su cuerpo y puse mis manos en su cintura, la agarre con fuerza y la levanté.
Ambos caímos en el balcón, ella arriba de mi me abrazó con todas sus fuerzas.
- Perdón Justin, perdón. -dijo mientras lloraba sin parar.
La abracé y sobé su cabeza con mis manos.
- No lo vuelvas a hacer _______, imaginate si no hubiera alcanzado a llegar, por favor ______, prometeme que no volverás a hacer una locura igual. -dije aún asustado.
- Lo prometo Justin, perdoname.
...
_______ estaba recostada en la cama viendo televisión, se veían tan tranquila, lástima que no podía decir lo mismo sobre mi.
Tenía que estar respondiendo llamadas sobre los guardaespaldas de mi padre, odiaba escuchar como mi padre les decía que me dijeran como torturar a _______.
*Llamada*
- Dejenme hablar con mi padre, cabrones. -decía yo muy enojado.
- Lo siento, eso no será posible, el jefe no desea hablar con usted.
- No me importa, es mi padre y tengo el derecho de hablar con el, ahora pásenle el telefono o lo lamentarán. -dije apretando el celular.
-Susurros- Lo siento, deje de molestar.
- ¿Qué jodidos son ustedes? ¿Sus secretarios? Dejenme hablar con el por una puta vez par de cabrones.
*Fin de llamada*
Maldije en mi mente y volteé a ver a _______.
- ¿Pasa algo Justin? -me miró asustada.
- Para nada, sigue viendo televisión.
Tenía que ir al almacen de mi padre, tenía que suplicarle que no le hiciera nada a ______, tenía que hacerle ver que ella no tenía la culpa.
Llamé a Tiana, mi novia la cual me consiguió mi padre para tener una buena imagen, Tiana no era más que una cualquiera, solo le importaba su cabello, su ropa, sus tacones, su maquillaje y su figura.
Hablé con ella para ver si me podía hacer el favor de cuidar a _______ mientras yo iba al almacén, la respuesta que yo esperaba era 'no' ya que nunca tenía tiempo de hacer nada, ya que siempre se la pasaba cojiendo con cabrones a mis espaldas, pero para mi sorpresa aceptó cuidarla.
- Iré a ver algunos asuntos con algunos colegas, te quedarás con mi novia, ella te cuidará mientras no estoy.
- No me quedaré con una extraña, Justin. -dijo enojada.
- Ya he dicho.
...
{Narra _______}
Justin me dejó con la palabra en la boca y se marchó. Hice un berrinche en la habitación y volví a ver televisión.
No había nada bueno en la tele, sólo películas aburridas. Escuché que alguien tocó a la puerta, maldecí en mi mente y me levanté.
Abrí la puerta y me encontré con una chica alta (gracias a sus tacones de veinte centímetros) pelirroja. La pelirroja me examinó de pies a cabeza e hizo un gesto de desagrado.
- ¿Tu eres _______? -preguntó en un tono grosero.
- ¿Tu eres la prostituta que dijo Justin que vendría a cuidarme? -dije del mismo tono.
- Si esa soy yo. -dijo con una sonrisa- Y no soy una prostituta, soy la novia de Bieber.
- ¡Que alegría! -dije sarcásticamente.
- ¿Me dejarás pasar?
- Dejame pensar, no. -dije y cerré la puerta.
*Tiana*
*Llamada con Justin*¨
- ¿Qué pasa Tiana? ¿Ya estas en el departamento? -dijo Justin en un tono frustrado.
- Si, aquí estoy. Y esa mocosa no me deja entrar, además me llamó prostituta. -dijo en tono molesto.
- Así es ella, vuelve a tocar a la puerta y cuando abra sólo quitala del camino y entra, muy fácil Tiana, no sé porque no lo hiciste.
- No quería verme grosera, baby.
- ¿De verdad? -dijo cási riendose.
- No, solo no quería tocar a ese insecto.
- Cuidala bien Tiana.
- Haré lo que pueda.
*Fin de llamada*
*_______*
Estaba acostada en la cama cuando de nuevo tocaron a la puerta. Me volví a levantar y abrí la puerta, la pelirroja me hizo a un lado y entró.
- Mira niña, Justin me dijo que te cuidara y eso haré, ¿ok? Te guste o no. -dijo mientras dejaba su bolso sobre una silla.
- Yo no necesito una 'niñera' -dije molesta- Se cuidarme sola.
- Cariño, si supieras cuidarte sola no estarías aquí.
Buen punto.
- Como si te importara que me secuestraran de nuevo.
- A mi no, pero a Justin si. -dijo Tiana mientras se ponía labial.
Continuará.
