El caballero de la noche (Leyenda)

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Dicen que algunos lugares de los campos, a media noche, hay quienes aseguran haber escuchado o visto a un jinete vestido de negro, con una capucha encima cubriéndolo por completo, escondiendo su rostro y montado sobre un caballo que es del color de la noche, y con cada paso que da en la tierra de sus patas sale humo; la gente lo llamaba el señor de la noche

Un campesino decidió salir a ver sus animales en el establo una noche asiendo caso omiso de las advertencias de la gente.

Salió de su casa y caminó por entre la maleza, hasta salir al camino del pueblo a los campos, la oscuridad era mucha, apenas visualizaba el suelo que iba pisando, el camino era de barro y rocas.

Caminó un buen rato, hasta que llegó, a una pequeña choza que se encontraba en el camino,  pero era extraño, el no recordaba esa choza, su establo no lo veía por ninguna parte ¿se había perdido?

Siguió caminando, cada vez todo le parecía más desconocido «¿En dónde estaba?» pensó.

De pronto escucho el ruido de un caballo que se acercaba corriendo, se giró a ver el lugar por donde había venido y una pequeña luz se alcanzaba a distinguir, cada vez se acercaba más, un terror inexplicable lo invadió

Hizo lo primero que pensó, se arrojó a un lado del camino y se ocultó entre la maleza.

De repente, todo estaba en silencio.
«¿Donde está el caballo?» pensó

Trató de ver hacia todas direcciones, pero estaba oscuro, de la nada sintió una fría esquelética mano sobre su hombro, que le provocó unos escalofríos.
Tenía terror, se giro a ver quien estaba tras él, y lo que vio fue demasiado:
Un hombre vestido de oscuridad, una capucha cubriéndolo todo, una frialdad emanaba de él, lo último que pudo ver fueron unos ojos de fuego.

Al día siguiente, los campesinos encontraron un cadáver a orillas del camino, tenía una expresión de horror en su rostro, nadie supo cómo murió.

Pero algo tenían claro:
Lo que vio no lo dejó vivir.

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