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_Hola_ saludó el mayor entrando a su casa viendo como Jimin dejaba a Jihyo acostada sobre el sofá del living.

_Hyung_ le saludó con felicidad el menor, pues estaba alegre de que su hermano mayor llegase a tiempo, debía ir a la academia de baile.

_Gracias por cuidar de Jihyo, te debo muchas hermanito_ dejó una carpeta blanca sobre la mesa y miró a su hermano que estaba poniéndose sus zapatillas.

_Me gusta su compañía... ¡Oh, casi lo olvido! TaeTae llamó y me dijo que tendrá que hacer guardia durante la noche en el hospital_ dijo con rapidez ya que no quería llegar tarde, era esencial llegar a horario o si no eras castigado y eso era un simple calvario para el menor.

_¿Quieres que te lleve?_ preguntó levantando en brazos a su pequeña princesita y vio a su hermano negar con rapidez. _De acuerdo_ murmuró no muy convencido. No lo entendía, siempre que se ofrecía para llevarlo en su auto el menor se negaba rotundamente.

Jimin se despidió de su hyung agitando un par de veces su mano y  salió de la casa del mayor, en el camino se peinó el cabello con los dedos de sus manos. La verdad era que el iba todos los sábados caminando hasta la academia porque durante el camino hasta la institución de baile, había podido conocer desde lejos a un chico alto que trabajaba en un taller mecánico.   

Si bien el chico era realmente apuesto y parecía ser torpe algunas veces, casi siempre lo veía con la ropa desarreglada o con algunas manchas negras en su ropa. A Jimin le parecía la persona mas atractiva del mundo, esos bellos ojos verdes y su cabellera gris lograban cautivar todo su ser y hasta lograba cautivar a su débil y temeroso omega de su interior.

Y como siempre él estaba ahí parado al lado de un auto, siendo regañado por su jefe o eso parecia, Jimin miró con atención al chico hacer un puchero al sentirse torpe luego de estropear el motor de aquel auto.

_Lo siento, no volverá a pasar jefe_ escucho Jimin aquella hermosa y grave voz, parecía ser el alfa de sus sueños.

Namjoon quería morirse, debía empezar a hacer de nuevo el trabajo, pero en cuanto se giró vio por la gran entrada del galpón a un lindo chico de cabello negro. Jimin no se dio cuenta de que se había detenido ahí y justo en frente de la entrada.

_¿Necesitas algo?_ preguntó Namjoon sin poder evitar sonreir ante aquella hermosa sonrisa que le dio el omega que solo negó y se fue como alma que se lleva el diablo.





...


Jungkook suspiró caminando aun con su hija en brazos hasta la habitación que estaba pintada con flores coloridas. Estaba cansado de discutir con su omega, Taehyung era rebelde, decidido y aveces caprichoso. Pero esas simples cosas lograron cautivarlo  y hacer que se enamore de ese pequeño omega.

Con cuidado dejó a Jihyo sobre la suavidad de su cama. La escuchó murmurar cosas que no entendía y sonrió con felicidad al verla dormir con tranquilidad.

_Descansa pequeña_ susurró apagando la luz para luego salir de la habitación de la infante y caminar hasta el living.

Miró la hora en su reloj iban a ser las una de la tarde, suspiró sabiendo que Taehyung posiblemente pasaría toda la tarde y posiblemente toda la noche también, atendiendo y salvando vidas, cuando debería procurar mantenerse a salvo ya que estaba en cinta, tenia dos meses de embarazo y él terco omega seguía trabajando.  

Se había cansado de tratar de convencer al omega de no seguir trabajando, pero el castaño era tan terco y con un par de melosos besos y mimos podía persuadir a su alfa interior.

Una simple mentira [KookV]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora