No puedo dejar de ver nuestras fotos, de verdad me estoy ahogando en un vaso. Cada que recuerdo que no seré capaz de ver nuevamente tu sonrisa, tus pucheros, tu ceño fruncido y nunca más volveré a poder escuchar tu voz cuando me sienta mal.
Cada que recuerdo algo de ti me rompo más, Aomine cuánto más debo aguantar.
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