Sugar, daddy ; kth, jjk [+18] COMPLETA

35. [el taller de las muñecas]

Mini maratón (2/2)

⚠️ Contenido sensible ⚠️

Qué puto miedo el título ಥ‿ಥ

Jungkook

Viernes, 10:56

Para cuando su voz rota cortó toda explicación de la profesora, ya era mi segundo día sin hablar con ella.

-¿Quién ha sido? -se giró desde su nuevo asiento marginal en primera fila, un papel arrugado entre sus dedos. Parecía que estaba a punto de llorar, no sabía si de rabia o de pena.

Tal vez había tenido pelea con su madre o tal vez todos estaban hablando de las fotos del parque.

Tal vez solo está más sola de lo que pensabas, imbécil

Nadie respondió, y la profesora permanecía estupefacta en la palestra. Oí algunos murmullos a mi alrededor, pero permanecí con la vista en Areum.

-Señorita So, acaba de interrumpir m...

-¿Quién coño ha sido? -repitió, sus ojos dedicando una sentencia de muerte asiento por asiento, hasta que llegó al mío.

No era difícil ver el dolor nítido que tenía en los ojos, pero a diferencia de ayer, hoy parecía enfadada. A Areum ya no le quedaba sanidad para estar triste.

Intenté averiguar qué estaba sucediendo, pero no me dio tregua y olvidó mis ojos en el fondo de la clase. Lo hizo con tanta facilidad que llegué a la conclusión de que me odiaba.

Yo en parte también lo hacía

Se me hizo un nudo en el estómago al pensar en que la chica más importante de mi vida me tuviera aversión, pero yo mismo había cavado mi tumba.

Creía que un tiempo en soledad me despejaría la mente, pero solo me estaba provocando más malestar. Ayer me sentí como una absoluta mierda al ignorar su llamado en educación física.

¿Pero qué podía hacer yo si Areum no quería mi ayuda para Kim? No podía entrometerme sin su aprobación, ella me había dicho que no era mi problema.

Aunque dudaba que pudiese aguantar dos meses sin entablar palabra con ella, estaba seguro de que ella no iba a sobrevivir de ninguna manera.

Ya estaba decayendo en picado

No era natural el blanco apagado de su cara, ni el uniforme arrugado que ahora parecía quedarle demasiado grande, y sus ojos...carecían de vida. Si ya estaba tan demacrada por fuera, no quería imaginar lo oscuro que estaría dentro.

No había valido la pena dejarla sola con ella misma, porque ya no quedaba nada que le hiciese compañía.

-¿Es muy fácil esconderse en el anonimato, eh? -absolutamente nadie sabía de qué estaba hablando-. Sois unos putos cobardes...

Incomodó más el ambiente al reírse sola; pasaba tanto tiempo con Kim que ya estaba adoptando algunos comportamientos psicóticos.

Y ese... De ese no me podía esperar nada aceptable si había extorsionado a una menor en un contrato ilegal, uno que desgraciadamente ya tenía validez.

-Es usted una maleducada. Salga de mi clase y no vuelva, So -la profesora le expulsó, y recogió sus pertenencias sin dejar de negar con la cabeza. Se veía a simple vista que necesitaba ayuda profesional, y reprimí el deseo de ir detrás de ella y darle el abrazo que tanto necesitaba.

Ella había estado a mi lado cuando las cosas se habían torcido, en cambio, yo... Yo le había dejado perdida a su suerte, con un ataque de ansiedad en el edificio del enfermo mental.