Miles de años atrás, Lucifer visito a su creador, porque en el infierno se corría el rumor de que Dios mandaría a una mujer, para que acabase con el, y el mundo volviera a tener paz, a pesar de que sus dudas fueron confirmadas, Lucifer no tuvo miedo...
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Samael se encontraba más despreocupado que nunca, tal vez el echo de morir en manos de una mujer que no conoce aun le suene algo poco probable, aunque para el, lo único que le importaba saber, era saber si, ella tambien tenía ansias de conocerlo, de destruirlo o... de amarlo.
— te la has pasado mirando lejos — la voz de Lilith a penas si lo hizo pestañear, no contó con la suerte de seguir en compañía de algún demonio
— ¿que quieres que haga?, ¿llamar a Dios?, ¿Miguel? — la distancia entre ambos seres se había recortado, Lilith había tomado el torso de Samael en sus manos —
— decirme si la conoces — respondió, sus labios se crearon en una siniestra sonrisa, y sus ojos se colocaron igual de rojos que la sangre pero con un brillo impecable —
pensar que ese era su mayor deseo, pensar que tenerla en estos momentos del mismo modo en que se encuentra Lilith era el deseo mas grande de Samael, pues por fin colocaría a prueba eso de que el amor es lo único que lo destruiría, salir de esa duda, de esa intriga y de esos deseos.
— es lo que mas quiero — Lilith se separo con recelo, el la miró divertido, y una sonrisa siniestra se adueño de su rostro —
— esto es estúpido — confirmo Lilith — te destruirá — le recordó —
— ¿como lo sabes?
— te vas a enamorar de ella, y el día que tenga que escoger entre estar contigo o seguir con ellos los escogerá a ellos — y el silencio se apoderó de todo —
celos, los celos definían a Lilith, madre de todos los demonios que sirven para Samael.
— voy a enamorarme por fin Lilith — Lilith se cruzó de brazos — y adivina —
— ¿Qué? — respondió con fastidio —
— no será de tí
La furia se hizo presente en Lilith, sus rostro se volvió duro, y tono morado empezó a adornar su rostro, que hacía unos segundos era delicado aunque malvado. Unas grandes ojeras, acompañadas de una oscuridad profunda en su mirada, sería el motivo de morir de cualquier humano.
— verás Lilith, como te he dicho millones de siglos atrás, tu no eres mi tipo, eres, insoportable — explico con burla — y no es lo que quiero —
— bien — la furia y la tristeza se apoderaron de Lilith, y una fuertes y oscuras alas no tardaron en aparecer, lo que hicieron que Samael quedará confundido — ¿quieres conocerla?, La traeré aquí — y con un fuerte aleteo se alejó del el —
La furia, confusión y desesperación de Samael lo hizo recrear todas las posibilidades.
1. Miguel creería que el envío a Lilith por la híbrida
2. Lilith hará el llamado a guerra
3. La traerá con vida, y la matará
El viento empezó a soplar con recelo, y la maldad que habitaba el cuerpo de lucifer empezó a salir a la luz, su cuerpo se hizo más grande, sus músculos se marcaron aún más, sus ojos se volvieron oscuros, unas fuertes ojeras hicieron notar su furia, y sus ojos se colocaron como la candela ardiendo.
