fall

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Y el día llegó. Hoy te vuelvo a ver; hoy vuelvo a ver esa sonrisa que me hace sentir como si estuviera en una ensoñación; hoy vuelvo a sentirme en medio de un torbellino de emociones.

Llegué temprano a esa casa a causa de mis ansias y nervios por verte de nuevo. No podía soportar la idea de llegar tarde, no podía hacer que esperases. Sin embargo, yo siento que podría esperarte todo el tiempo del mundo.

Pronto llegaste y rápido mis ojos se hallaron frente a algo digno de enmarcar. Tu labio inferior sobresaliendo y cejas ligeramente arqueadas hacia arriba, a lo que si le sumabas las prendas que portaba, se reproducía la más bella y pura de las imágenes. Estabas preocupado por que pensabas que habías tardado demasiado. Simplemente tierno, así lucías.

Estuvimos hablando de cómo nos fue esta semana que había pasado. Cuando se hizo tarde llegó el momento de separarnos de nuevo, obviamente volvimos a citarnos para la próxima semana en el mismo lugar y aunque me hubiera gustado pedirle su número de teléfono para hablar con normalidad otros días, no me sentía como para hacerlo porque no sabía ni tu nombre.

Ese era otro tema, su nombre. El sabía el mío porque se me había escapado cuando le estuve contado sobre algun evento reciente que haya vivido. Pero, ¿el suyo? no había escuchado ni que lo mencionase. Me daba bastante vergüenza preguntarte a estas alturas por el tuyo, así que lo dejé pasar.

Justo cuando ya nos habíamos despedido y había empezado a caminar para irme, rompiste el silencio.

—Oye Changkyun.— dijo en voz alta, haciéndome girar para mirarle.

—Jooheon, me llamo Jooheon.— Como si de magia se tratara, aclaraste la duda que me carcomía y sonreíste una ultima vez antes de irte.

¿cómo es posible que con tan solo un nombre y un gesto podía haber caído tan profundo por alguien?

mirrors ; jookyunDonde viven las historias. Descúbrelo ahora