El Nudo De La Garganta

Cinco minutos.

Desde el dia siguiente a esa noche no había vuelto a llorar, ahora acabo de vivir algo mágico...
He visto tu libro y lo he cogido con anhelo, anhelo a ti, lo he abierto por la página donde lo dejé, leyendo te he vuelto a ver y sin tu mirarme te he vuelto a sonreír. Sí, estaba nostálgica pero feliz. Raramente pasa que mi perra suba a verme pero apareció tan loca como siempre, pasó algo diferente me miró y lentamente se subió encima de mi. Se puso de tal manera que sentí que me abrazaba, empezó a darme lametones en la cara y no sé si fue por estar sensible o porque pero empezé a llorar mientras sonreía, después de cinco minutos cortos se empezó a quedar dormida. Cinco minutos en los que te sentí tan cerca, tan pura y no, no hablo de la perra, hablo de tí. No te mentía cada vez que decía que eras magia, sin darte cuenta has conseguido que mi corazón vaya al compás de un baile lento.