Estaba de vuelta a casa, raramente iba sin cascos, tenia la vista fija al suelo como dos paso por delante y a mitad de la calle te escuché...
Juro que creía que eras tú, un ladrido idéntico al tuyo. Paré en seco, miré rápidamente al frente y sentí como algo por dentro se movía, por un momento fui feliz pensando que te iba a volver a ver, tras unos segundos un atisbo de realidad me golpeó. Claro que no te volveré a ver, ni oler y mucho menos tocar. Pero hay algo de lo que estoy segura, te voy a volver a sentir y me vas a seguir cuidando, igual que hacías antes e igual que en el momento que te creí escuchar. Gracias por ser mi ángel guardián. Te quiero y te echo de menos Jackuchi...
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El Nudo De La Garganta
Kısa HikayeVoy a escupir en letra lo que mi garganta no consigue tragar.