[Antes de leer, quiero decir que no estoy promoviendo ni alentando a practicar el canibalismo ni prácticas relacionadas en ninguna manera. Los actos y lugares descritos son ficticios]
Por favor, re planteate si quieres continuar con la lectura, si eres sensible a estos temas y te estás arriesgando, es mejor que lo dejes, como mencioné anteriormente, no hay intención alguna en dañar la imagen de oneus.
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❝ 𝑨𝒏𝒕𝒓𝒐𝒑𝒐𝒇𝒂𝒈𝒊𝒂 ❞
- ¡Corre más rápido, cariño! - gritaba Youngjo hacia Hwanwoong que iba unos cuantos metros detrás de él. A lo lejos se comenzaban a escuchar sirenas provenientes de la policía y ambulancias.
Hwanwoong reía a carcajadas mientras corría más rápido alcanzando a su novio y tomándolo de su mano que se encontraba libre.
- ¡Lo hicimos, Youngjo! - Hwanwoong no podía contener su emoción aún excitado por tanta adrenalina.
Después de estar corriendo por los callejones oscuros y siendo cuidadosos de no ser captados por ninguna cámara de algún establecimiento, se detuvieron frente a la puerta de un viejo local abandonado, una antigua cafetería, que habían comprado. Se acercaron a éste y asegurándose de que nadie los viera entrar, cerraron la puerta detrás de ellos adentrándose al polvoriento lugar.
Youngjo depósito la bolsa negra que llevaba en manos sobre una mesita que se encontraba ahí, yendo hacia un pequeño armario por la antigua sala de empleados. Con toda su fuerza lo hizo a un lado, dejando ver una puerta cerrada con candado, sonriendo hacia su novio cuando notó que había tomado la bolsa que Youngjo tenía antes.
Quitó el candado para poder abrir la puerta pequeña que dejaba a la vista un pasillo lo suficientemente alto como para que ambos cupieran de pie. Youngjo hizo un gesto con la mano invitando a Hwanwoong a entrar primero.
Hwanwoong obedeció en seguida, dejando primero un húmedo beso sobre los labios de Youngjo antes de sonreírle lascivamente para después adentrarse en el pasadizo. Una vez adentro, Youngjo jaló el armario cubriendo muy bien la pared y cerró la puerta por dentro con el mismo candado. Comenzaron a caminar por todo lo largo del pasillo con respiraciones profundas, el cansancio se comenzaba a hacer notable en ellos después de que toda la adrenalina que anteriormente tenían disminuyera en su sistema.
Finalmente, se toparon con otra puerta que Youngjo se encargó de abrir cediendo nuevamente el paso a su pequeño novio. El pasadizo estaba conectado con el patio de su casa donde los estaban esperando cuatro chicos sentados cerca de dicha puerta, esperando ansiosos por el momento en que se abriera y dejara ver a ambos chicos.
Cuando escucharon el sonido de una puerta abriéndose, corrieron hasta estar frente a ésta todos moviéndose inquietos en su lugar y esperando con las pupilas totalmente dilatadas. Hwanwoong asomó la cabeza cuando su novio abrió la puerta, viendo cuatro pares de ojos expectantes.
