La Guerra Que Libramos || Hombreslobo

#2

ATRAPADA

P.O.V Alyssa:

Bienvenidos a esta historia, mi historia. empecemos por donde se debe empezar: Soy Alyssa "Pedrattza", ese es el apellido de mi mate, Tengo 19 años y soy una puente humana/espiritual.

Cómo puente tengo ayuda de pequeñas voces que me guían en esta vida cruel, mi loba Jane, mi vampira Cathlyn, mi ángel Elena, Mi demonio Derek, y así la lista sigue y sigue.

Quiero empezar de buena manera así que miremos el pasado

(...)

Vivía en tranquilidad en la hermosa ciudad de Santiago, Chile. Me encontraba aquí estudiando diseño gráfico en una universidad completamente pagada pero que es la mejor dónde puedes estar, ingresé a los 18 años.

Cómo está no era mi cuidad de origen, este era un lugar nuevo, estuve en un departamento de 1 habitación, de renta unos $176.49 dólares, más o menos, pero en pesos chilenos con exactitud son $150 "lucas". Para pagarlo empecé a trabajar como mesera en una cafetería, tenía un salario fijo y lo que ganará en propinas es dinero extra.

Vivía en paz. Así es, vivía, en pasado.

(...)

-Oye Trini!- esa era yo, hablándole a mi mejor amiga

-wena! Cómo estai' weona?- y esa es mi mejor amiga

-girl You are so... Crazy.

-habla bien aweona'

Soy británica, y pues casi nunca entiendo a esta chica, pero la amo con toda mi alma.

Vi un auto detenerse frente a nosotras, nos preguntaron quién era Alyssa Jones, les pregunté que de parte de quien preguntaban. Esos hombres musculosos me llevaron a fuerzas, recuerdo bien lo que mis guías decían.

-voy a romperle la cabeza a estos!- gruñía mi loba

-mantengamos la calma- trataba de calmar mi ángel.

Entre otras cosas.

Llegué a una gran mansión, muy rústica pero con un toque moderno, las paredes eran hermosas hechas de madera antigua, rodeada de un espeso bosque, el olor a pino y a libros nuevos estába en aire. Ahí lo supe.

-M.A.T.E- escuché en un gruñido.

Mi mundo se cayó a pedazos, una vez adentro me llevaron a una oficina, mi supuesto mate me miró con asco y exclamaba que era un fenómeno y una vergüenza, mando a qué me encerraran en un cuarto y esa noche nos unimos.

•No hubo marcas.

•No hubo amor.

•No hubo paz.

•No hubo placer.

Solo dolor, insultos, gruñidos, y golpes.

(...)

Lo último que recuerdo esa noche es escuchar el llanto de mi loba por el trato de mi pareja.

Ya pasó un año, mi mate se casó con otra loba de alto rango, y yo aún no tengo un heredero así que estoy a salvó. Decidí que no podía vivir así, entonces, planeo escapar.

Mi vampira convenció a rey vampiro de aceptarme en su hogar, ellos vendrán por mi, está noche.

(...)

10 p.m. y yo ya estoy lista, tengo un bolso con ropa, deje una carta encima de la cama y estanque la puerta para que no me detengan.

Escuché un ruido bajo el balcón y luego un golpe en la puerta.

-Abre!- exige mi mate.

Sin ninguna palabra solo salté y me atrapó un chico de ojos tan rojos como la sangre. Me subió a su espalda y salió corriendo más rápido que la luz.

No sé lo que me espera ahora, pero debo acabar la guerra. Esa es mi misión.