Too

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Llevaban bastante tiempo juntos y sus amigos solían decir eran almas predestinadas, aunque ellos preferían decir que su inteligencia era comparable y por ello podían permitirse salir con el contrario, jamás admitiendo frente a otros que estaban malditamente enamorados.

Aquel día ambos habían salido demasiado tarde de clases, a eso de las ocho de la noche y con el frio calando sus huesos, no habían comido casi nada durante el día por lo que al llegar a casa lo primero que hicieron fue devorar la pizza que llegó al mismo tiempo que ellos, quien diría que el pelirrojo sabría cuanto tiempo tardaba el delivery desde el local hasta el departamento que compartían, mismo que habían adquirido después de graduarse.

Consumió cada uno entre tres y cinco piezas antes de quedar satisfechos y se decidieron a ver una película, aunque Asano había expresado intensamente su preferencia por el documental sobre moléculas.
Terminaron viendo una película basada en un libro, con lo cual Gakushuu se conformaba.

El título de la película apareció en la pantalla dando inicio a la misma. Se mantuvieron en ello menos de la mitad de la película a partir de allí Karma se dedicó a molestar a su novio, con la vaga excusa de que la película era aburrida, patraña, Karma ya la había visto y aquello le quitaba la emoción a cualquier suceso, al menos para él.

"¿Porque nunca me presentaste a tus padres?" Pregunto el pelinaranja, realmente no era del tipo de persona que haría esas preguntas, normalmente ignoraría el hecho pero le preocupaba que el pelirrojo estuviera en una mala situación y no se lo hubiera dicho.
El suspiro del pelirrojo solo confirmo que algo había.

"No he hablado con ellos desde hace mucho" Dijo finalmente, Asano no estaba entendiendo y eso era extraño.

"¿No te llamaron hace unos meses?" Según lo que él recuerda Karma se había levantado en un momento mientras cenaban para hablar con sus padres por teléfono.

"Es tonto" Confesó, realmente no tenia mucho ánimo para hablar de ellos pero sabia que Asano no iba a parar hasta saber que lo perturbaba, era quizá demasiado sobreprotector cuando de sus sentimientos se trata (todos son conscientes de que físicamente Karma es capaz de defenderse solo, más lo emocional es un tema aparte).  "Mis padres nunca quisieron tener hijos, solo lo hicieron por la insistencia de mi abuela. Ella me cuido hasta que falleció cuando tenia ocho, mis padres creían que ella les iba a dejar su herencia ya que no tiene más hijos pero me la dejo a mi con la condición de que se me permitiría tomarla cuando cumpliera dieciocho. Como no les quedaba de otra me dejaron en casa de mi abuela y mandaban dinero cada tanto tiempo. Simplemente me llamaron para avisarme que ya no tenían ninguna obligación conmigo."

"¿O sea que ambos estamos solos?" Preguntó.

"Exactamente" Confirmo el pelirrojo recordando lo ocurrido la misma noche que Gakushuu le confeso a Gakuho que salía con él, horas más tarde (cuando ya estaban vestidos, para su suerte) Gakuho regreso con la intensión de pactar con Gakushuu el no confesar nada de sus gustos extraños hasta que no viviera bajo su techo pero al encontrarlos a ambos durmiendo juntos el hombre simplemente reacciono mal.

"Tu no volverás a estar en esta casa hasta que seas un hombre como corresponde" Dijo el Asano mayor mientras tiraba una maleta "Empaca tus cosas, no te quiero ver aquí en la mañana" Y se fue.

Ambos estuvieron viviendo en la casa del pelirrojo hasta que termino el año, trabajando a medio tiempo ambos para ahorrar lo suficiente e irse a otro lugar cuando se graduaran. Lo consiguieron tiempo después y se fueron lejos de todos.
Alquilaron un departamento donde vivían ahora mientras trabajaban y estudiaban.

"No los necesitamos, somos mejores que ellos" Hablo Asano y Karma se permitió reír por aquellas palabras a las que se había acostumbrado tanto.

GrabaciónDonde viven las historias. Descúbrelo ahora