~ Profesora sustituta ~ Albalia // Short Fanfic (SF) (Pausada)

~Capitulo 5~

ALBA

Bajé del bus y vi a Natalia esperándome enfrente de la puerta de la Uni, sonreí. Me iba a acercar a ella cuando me acordé de la excusa que le había puesto para quedar aquí. Rodeé el edificio y entré por la puerta trasera para luego salir por la principal y simular que salía de la Uni de verdad. Entonces me encontré a Natalia recostada en su moto, iba preciosa, con semejante pibón me había ido a cruzar yo... Me quedé unos instantes observándola y ella sonrió.

- Hola rubia - dijo con tono coqueto - ¿te gusta lo que ves? - no pude ni contestar, solo sonreí, pero ella no se quedó corta con el repaso que me hizo - porque lo que veo yo no está nada mal, podría quedarme toda la noche mirando - me dio otro repaso rápido y sonrió ante mi silencio - Pero mejor vamos yendo para el restaurante - me ofreció el casco. 

- Sí mejor - me acerqué y me puse el casco. Subí a la moto y le susurré al oído – tú tampoco no te vas a librar, que aunque no lo haya dicho antes vas pibón.

- Sí, lo he deducido por cómo te he dejado sin palabras.

- Cállate - solté una carcajada y me abracé a su cintura - mejor nos vamos.

Natalia dejó la moto cerca del restaurante y al entrar pude ver que, a pesar de no ser lujoso, era muy bonito y acogedor, y por los precios de la carta no parecía demasiado caro. Nos dieron una mesa y nos sentamos.

- Muy bonito el restaurante - dije sinceramente.

- ¿Sí? - asentí, parecía un poco insegura - Pues me alegro de que te guste, no te he llevado a un restaurante de lujo porque no me gusta pagar mucho para comer poco o algo que no merece su precio.

- Estoy muy de acuerdo contigo, y tranquila, no necesitas lujos para impresionarme - sonreí mirándola a los ojos.

Durante la cena hablamos de distintos temas triviales y me reí mucho con ella, aunque Natalia tampoco se quedó atrás, ya estaba más cómoda conmigo y me alegraba que se soltara, aunque también me daba un poco de miedo. Llegó un momento de la cena en el que me acordé de algo.

- Oye Natalia, tengo curiosidad sobre algo - ella levantó una ceja haciéndose la interesante - No es que te haya buscado ni nada, pero vi a Natalia ... - me quedé pensando - Dyer en Instagram y me acordé de ti, y pues me preguntaba porque tú no tienes cuenta en Instagram, hoy en día todo el mundo tiene - iba a hablar, pero la interrumpí - que ya sé que tú no eres todo el mundo, pero...

- Alba, tranquila - se río por el ridículo que acababa de hacer. Salí del trance y yo también me reí, sintiendo mis mejillas enrojecer - ¿Ya sabe el director que te entretienes "stalkeando" a tus alumnos?

- Las dos sabemos que tú no eres "solo mi alumna" - dije con obviedad.

- Eso no te lo voy a discutir.

- Naat, responde a mi pregunta - insistí.

- ¿Así que ahora usas apodos cariñosos para persuadir a la gente?

- ¿Así que ahora cambias de tema para rehuir mis preguntas?

- Si respondes a mi pregunta te contesto a lo de Instagram.

- Tu ganas - levanté las manos en señal de rendición - solo lo hago contigo.

- ¿Lo de los apodos?

- Te toca a ti responder.

- Vaale - recostó los codos sobre la mesa - pues la verdad es que no tengo cuenta en Instagram. Porque no me gusta compartir mi vida ni tampoco me interesa la de los demás, además me parece una pérdida de tiempo y de esfuerzos y un sitio lleno de mentiras y de gente intentando aparentar lo que no son.