𝚈𝚘𝚞 𝙰𝚗𝚍 𝙸||𝑪𝒉𝒂𝒏𝒈𝑳𝒊𝒙|| (ᴇɴ ᴇᴅɪᴄɪóɴ)

<𝓔𝓹í𝓵𝓸𝓰𝓸>

"Que sepas que no me drogo."
Fue lo primero que a Felix se le ocurrió decir cuando llegaron a un extraño callejón.

"No vinimos aquí por drogas, tonto."
Changbin rió y siguieron caminando.

"Oh... Tampoco me gustaría prostituirme."

"No es nada de eso, Lix."
Rodó los ojos.

"Oh... Bueno, entonces quiero que sepas que no me gustaría fumar."

"Lix, que no es nada de eso."
Changbin rió y pronto encontraron una puerta, sacó unas llaves y abrió.

"¿Por qué tienes una llave?"

"Un amigo me prestó el lugar, no lo utiliza y bueno, hice esto..."
Changbin abrió la puerta y le mostró el lugar decorado con globos de diferentes colores y la comida que estaba encima de una mesa bastante linda y sillas al rededor.
"Ya que la anterior vez todo fue un desastre, quise volverlo a intentar, admito que no fue fácil hacerlo solo pero supongo que lo conseguí."

"¿Hiciste todo esto?"

"¿No me escuchaste?"

"Muchas gracias Changbin... Por todo."

"Yo debería de agradecerte a ti, me enseñaste muchas cosas y me ayudaste también."
Changbin se acercó a Felix, estaba por besarlo cuando un sonido proveniente de algunas cajas en el fondo de esa habitación los asustó.

"¿Qué fue eso?"
Preguntó Felix un poco asustado.

"¿Hola?"
Habló pero no recibió respuesta alguna.
"Iré a ver."
Comenzó a caminar hacia el lugar del que provenía aquel extraño ruido que no pudo identificar. Movió una caja y no encontró nada.
"Parece que no hay nada, Lix."
Miró hacia atrás pero cuando regresó la mirada algo se abalanzó sobre él e hirió su cuello.

"¡Changbin!"
Felix gritó y observó a la pequeña criatura que se encontraba sobre Changbin.
"¡Gatito!"
Exclamó y corrió hacia él para cargarlo y acariciarlo.

Se levantó y tocó su cuello.
"Estoy sangrando... ¡VOY A MORIR! ¡ME VOY A DESANGRAR! ¡LLAMA A UNA AMBULANCIA!"
Gritó.

"Binnie tranquilo, sólo es un rasguño, no te preocupes."

"Oh, tienes razón."

"¿No es lindo? ¿Tienes dueño?"
Preguntó inocentemente al gato como si le fuera a responder.

"Le preguntaré a mi amigo si el gato es suyo."

"Bien."

Changbin sacó su teléfono y llamó a su amigo poniéndolo en altavoz.

"Hola San, tengo una pregunta."

"Hola, ¿Qué sucede?"

"Hay un gato en el sitio, ¿Es tuyo?"

"Oh, ese gato... Olvidé decírtelo, hay un gato viviendo ahí, lo suelo alimentar todos los días pero no, no es mío."

"¡¿Podemos conservarlo?!"
Preguntó Felix.

"Uh... Claro, no hay problema."

"Muchas gracias."

"Uh, eso era todo San, gracias por todo, nos vemos más tarde."

"Adiós amigo."