Danger (Eric) Divergente

Capitulo 11

Llegamos a Osadía de nuevo. Toda la adrenalina que tenia en mi cuerpo era estupenda, me sentía invencible y estaba tan contenta que nada podría arruinarlo. Mi cabello estaba arruinado, estaba muy segura de eso por lo cual decidí soltar mi cabello y dejarlo así para que pueda ir quitando los nudos con mis dedos, sentía como lo revuelto se iba al pasar mis manos

Divise a mi hermana hablando por lo cual sonreí picara, ellos no sabían que los veía pero esto me afirmaba de todas las teorías mas locas que se me pudieron imaginar, yo estaba encantada de que a ella le gustara él (aunque ella no me lo dijera aún). Me di la vuelta para darles privacidad pero choque con un muro que me hizo dar dos pasos hacia atrás, ¿había un muro?

-Me disparaste- Oh por dios, el muro habla.- ¿Qué piensas decir en tu defensa?

Alcé la mirada para encontrarme con un Eric algo ofendido, hice una mueca y voltee los ojos, eso creo que le enfureció mas porque apretó su linda mandíbula que tenia.

-Juegos de guerra, es lo único que diré- Le sonreí inocente.- Mi hermana no se va, ¿verdad?

-Claro que no, no después de haber jugado así, se salvo por suerte pero debe mejorar o se irá-Dudaba de si su sonrisa era por satisfacción o para dar ánimos, cambió esa sonrisa de inmediato por una de duda.-Estabas hasta el otro extremo, ¿cómo llegaste a dónde yo estaba?- Abrí los ojos.

¿Cómo que le digo que corrí como desquiciada solo para dispararle?, ¿sonaría muy intenso? Prefiero esquivar su pregunta en todo caso. Aclaré mi voz y le mire lo mas inocente posible, haber sido abnegada ayudaba en esto.

-Tú no puedes saber si yo estaba cerca o lejos, lo que dices puede ser o no falso- Dije excusándome.- En todo caso, yo debía ayudar a mi equipo y eso es lo que hacia.

-Así que no admitirás que querías dispararme- Bufe por su teoría acertada que quería hacerle creer que era falsa. Él cruzó sus brazos haciendo que sus músculos se tensen y sean mas notorios. El lugar había aumentado de temperatura en segundos a mi parecer, estaba demasiado caliente el lugar que hizo ponerme roja o creo que solo era yo.

-No tengo porque admitir algo que puede ser falso o no- Mis manos picaban, estaba algo nerviosa porque me descubra y por la cara de tomate que debía tener en estos momentos.

-No se va a quedar esto así, iniciada- Se fijó en los alrededores y luego se acercó a mi.- Si vuelves a desafiarme así no podre contenerme.

-¿Y si quiero volver a hacerlo?- Dije mirándole.

Ambos nos mirábamos, siempre nuestras miradas eran tan intensas que inmediatamente podías sentir la vibra que ambos dábamos. Mire sus labios y en mi mente volvió ese beso que tanto me había dejado exhausta y con mil dudas.

-Entonces tendrás que aceptar las consecuencias- Bajo su mirada a mis labios y por un leve instante algo en mi interior deseaba que los besara.

-Quiero ver si te atreves- Dije para luego alejarme.- Por cierto, estando en el suelo ya no eres tan atemorizante.

¿Él cree que es el único que puede jugar así? Está muy equivocado, yo igual puedo hacerlo. Mi parte abnegada gritaba por dentro para que pare mis locuras de retar a mi líder, mi parte veraz decía que admita que esto me encantaba, la parte erudita decía que esto podría llevar a problemas y que decir de la osada, la osada me exigía besarle delante de todos. Apreté mis labios para calmar mis emociones enfrente de él.

-Te veré después, l-í-d-e-r -Dije recalcando mucho la palabra "líder", estaba cansada de la palabra "iniciada" y esperaba que con esto entendiera.

Él hizo una mueca que a mi parecer intento ser una sonrisa, le sonreí para luego irme con mis amigos que se me habían adelantado para dejarme sola por completo, malagradecidos.