Fase 2

138 11 9
                                    

Jeje... Ya me veo fallando, bien comienzo de la escritura: 11/05/2020 a las 18:18 hs.



































-------------------------------------------------

"Reflejos"

By: Srta_Infernal

13/05/2020

-------------------------------------------------

























































¡Esta muriendo!

¿Qué debo hacer?

— ¡La ambulancia no llega!

¿Por que debe pasarme a mi?

— ¡Yo soy médico!

Sin duda que en una situación así la persona que grita eso: es un héroe.

¿No es curioso? Claro que si. Con un simple hecho de que una persona con conocimiento en medicina este en una situación de vida o muerte era un héroe, un héroe a pesar de que aquella víctima muera, pero siendo yo el médico no permitiría que muera. No puedo permitirlo, más siempre están aquellos buitres con sus típicos bajos; "¿Pagan muy bien como para estar entre enfermos y muertos, no?", "Mi prima es médico y la echaron por contraer VIH de un paciente herido", "Pero a ti no te agrada la gente", ¡Que más da! Es mi trabajo, ¡Yo lo decidí! Y aunque todos estés contra mi yo le salvare la vida a aquellos que me necesiten.

¡Ánimo!

— ¡Yo te salvaje, no te mueras!

Desde niño era muy tranquilo, indefenso e idiota. Como siempre estaba sólo gracias a mi mí apariencia, desde cabello, piel blanca a unos ojos muy llamativos de un extraño color turquesa, algo que no todos pueden aceptar, para todos siempre fui un bicho extraño, se burlaban de mi, me maltrataban tanto física como psicológicamente. A pesar de ser un niño no me importaba estar sólo, con mi madre era suficiente, siempre tuve una adicción y esa eran: los superhéroes.

Si lo recuerdo...

— Mamá algún día seré un héroe...

Era muy tierno, siempre con una sonrisa agradable. Papá no a vuelto desde la última vez, sólo cada tantos días mamá me lleva a un lugar lleno de cajas, eso era lo que creía que eran simples cajas ignorando el hecho de que en una de esas tumbas yacía mi padre.

— Claro cariño, serás un gran héroe... pero por favor, no se te ocurra saltar del techo.

Había vuelto a sonreír, mi madre era la mejor de todas y aunque no nos parecíamos en apariencia física si en nuestra personalidad. Ella se había volteado con una dulce sonrisa mostrándome lo hermoso que le había quedado el pastel.

Fue una linda infancia, con mamá y con los pocos recuerdos que tengo con papá, sólo tengo una fotografía para apreciarlo.

Cada tanto tiempo ella preparaba un pastel, ¿alguna celebración? Claro que no, sólo era un pequeño refrigerio para invitados y nosotros, nos encantaba el pastel.

— Mami... Cuando sea un héroe... Ya no podré verte...

Mi quebradisa voz llamó a su mirada mientras mis lágrimas caían sobre la rebanada de pastel, aún así mantenía mi sonrisa.

Cayendo En Tú Mundo. | Jelsa ✓ #CLJelsa4Donde viven las historias. Descúbrelo ahora