Capitulo 15

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*Al otro día*

Otra vez el timbre sonaba repetidas veces como ayer e hizo que Manuel se despertase, bostezó y como un zombie caminó hasta la puerta para abrir, ¿y quién era? Mario.

Mario: Dile a esa perra que firme estos papeles

Manuel: ¿No tienes algo que hacer con tu vida?

Mario: No, dale esos papeles y que los firme

Manuel: Dame, espera aquí afuera, yo se los doy y ahora te los entrego

Mario: Y no te olvides del dinero

Manuel: Claro, 400.000, el mejor negocio de mi vida

Mario: Sí, compraste a una puta

Manuel: Bueno, si es una puta supongo que tiene sus ventajas, follará de maravilla... ay, ya quiero tenerla debajo de mí gimiendo mi nombre, diciéndome que no pare, que me ama, que me desea... debe de ser perfecto oírla decir todo eso

A cada palabra que Manuel soltaba Mario se enfadaba más y más, apretó sus puños con tanta fuerza que llegó a enterrar sus uñas en las palmas de sus manos haciéndolas sangrar pero prefirió reírse como un loco, puso la mano en el hombro de Manuel y le dijo:

Mario: Eso lo sabes a la perfección amigo... además, es mil veces mejor cuando ella va encima, se mueve de una manera impresionante, vamos, como una puta profesional

Manuel: Buen detalle, gracias por compartirlo, dentro de poco lo sabré a la perfección... ahora si me permites voy a darle estos estúpidos papeles para que así sea libre y sea solo mía

Mario: Mantenla lejos de tus amigos, no vaya a ser que te haga lo mismo que a mí

Manuel: Gracias por el consejo- sarcásticamente.

Después de decir aquello Manuel cerró la puerta, se acercó a los sofás y empezó a golpear varias veces a uno de ellos imaginando que era la cara de Mario, al cual moría por darle todos esos golpes.

T: ¿Manu?

Manuel: Firma esos papeles, pero primero leelos

T: Ok

___________ cogió aquellos papeles y los leyó, cuando vio que todo estaba en orden los firmó y se los entregó a Manuel, el cual salió y se encontró con Mario.

Manuel: Aquí están los papeles y el dinero, ahora vete de aquí

Mario: Que sean felices por siempre, bueno, hasta que te engañe jajajaja, disfrútala

Después de decir aquello Mario subió a su coche y se fue a su casa donde desató toda su furia rompiendo cosas, sacó una botella de whisky y empezó a beber del pico mientras reía y lloraba.

Mario: Maldita, me rompiste el corazón, pero me las vas a pagar jajajaja, me las vas a pagar- gritó para luego tirar la botella vacía contra la pared, se levantó y tambaleándose fue a buscar otra botella para bebérsela.

*Manuel y __________*

T: Jamás pensé que todo esto pasaría

Manuel: Ni yo, Mario estaba bien, te amaba demasiado pero sus estúpidos celos lo ganaron

T: Me siento mal Manu, él tiene una imagen muy equivocada de mí y es injusto

Manuel: Lo sé, pero ya se dará cuenta de lo equivocado que está y para ese entonces ya estaremos casados

T: ¿Nos vamos a casar?

Manuel: Si quieres

T: Yo... prefiero esperar un tiempo, cuando esté preparada lo haremos

Manuel: Vale, sabes que esperaré lo que quieras, pero no mucho, me muero de ganas por hacerte mi esposa

T: Gracias por todo Manuel

Manuel: De nada preciosa, sabes que te amo

T: Sí

La verdad es que ___________ se sentía muy incómoda cuando Manuel le decía todo eso pero decidió dejar de hacerlo e intentar pensar de forma diferente sobre él, ahora mismo lo veía como su hermano mayor y su mejor amigo pero esa imagen podría cambiar y llegar a enamorarse de él ya que Manuel es el tipo de hombre que toda mujer desea, quitando su profesión, pero por lo demás es perfecto.

Vendida a un alemán (Mario Götze y tú)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora