Lucía Miranda (Erika Buenfil) 48 años trabaja en una empresa de publicidad que le heredó su padre,su vida se desmorona poco a poco, se está divorciando de Ángel Acosta (Eduardo Yáñez) 50 años quien trabaja en la empresa de Lucía como director genera...
Bruno: Si, pero aún no puedes ver, no vayas a sacarte la venda de los ojos (llevandola).
Lucia: Estoy ansiosa, ya puedo ver.
Bruno le sacó la venda de los ojos...
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Bruno: Te gusta?
Lucia: Me encanta mi amor (puso sus manos en el rostro) es hermoso y mira...con velas.
Bruno: Sigamos el camino de las velas (levantando la ceja).
Lucia: No trajimos ropa, que haremos.
Bruno: En mi auto está la maleta que preparé con mi ropa y la tuya.
Lucía: Tenías todo preparado.
Bruno: Era una sorpresa, no podia decirte que empaques.
Lucia: Eres tan detallista.
Bruno: Porque te amo.
Bruno llevo a Lucía a la cama, ella lo abrazó y lo miro a los ojos...
Lucia: No puedo creer que estemos casados (sonriendo) estas muy loco Bruno pero te amo.
Bruno: Quería asegurarme de que seas mia para siempre, te amo esposa.
Lucia: Te amo esposo (lo beso).
Bruno: Este vestido esta hermoso amor pero esta estorbando, no crees?
Bruno le sacó el vestido, Lucía lo rodeó con sus brazos y se besaron intensamente...
Bruno: Mi reina, mia.
Lucia: Mi único dueño eres tú.
Lucía comenzó a abrir la camisa de Bruno y a tocar su pecho, él se desabrocho el pantalón y se lo sacó, la recosto en la cama, se puso encima de ella y comenzo a besarla, sus lenguas no paraban de moverse, Lucía bajo sus manos y Bruno se las agarró...
Bruno: No! Esta vez quiero hacerte disfrutar a ti, yo me ocupare de todo (sonriendo) tu déjate llevar...
Bruno apretó las manos de Lucía y sin soltarla comenzó a besarla, bajos sus besos pasando su lengua por su cuello y por sus senos, eso hizo que Lucía se arqueara, bajo sus besos más y más y agarró con los dientes la ropa interior de Lucía y fue bajandola, se la sacó, se puso en medio de ella, le abrió más las piernas y comenzó a besar su intimidad haciendo que Lucía suelte un fuerte gemido, siguió besando y lamiendo muy suavemente, Lucía moría de placer, no paraba de gemir una y otra vez, Bruno seguía besando la intimidad de Lucía pero ahora metiendo su dedo y Lucía gritó y eso hacia sentir más excitado a Bruno, ella con sus manos apretó las sábanas ya no podía más, él sacó su dedo y pasó su lengua lentamente por última vez y subió pasandola por el vientre de ella, sus senos y hasta llegar a su boca, la beso y entró en ella mirándola a los ojos...
