En busca del amor

La charla

Capitulo Dos

La charla.

Al tocar el timbre sentí que el tiempo se paralizo, ya no había vuelta atrás, ya no existía posibilidad de escapar, los nervios en mi eran demasiado intensos como para describirlos, casi estaba temblando.

Al ver que no había respuesta decidí tocar nuevamente, pero tampoco salió nadie, así que me di cuenta de que no había nadie en la casa, Misión fallida.

Decepcionado por lo sucedido, me di la vuelta para ir a casa, la vi a ella llegando, caminando con porte de modelo hacia su casa, al parecer venia de la tienda ya que traía unas bolsas con ella, y decidí saludarla.

-Ho...Hola- dije con voz nerviosa

Me observo con cara de confusión-Hola-Me respondió mientras se sonrojaba. Por fin estaba hablando con la chica que no podía sacar de mi cabeza, en ese momento me paralicé por un momento, pero reaccione.

-¿Te...Te acuerdas de mi?, estudiamos juntos en el jardín de niños.

-Por supuesto- Dijo mientras sonreía.

Ahhhhh se acuerda de miii, no, tranquilo Pol este no es momento de emocionarse.

-¿Qué hacías?- En ese momento se me cayó la cara de vergüenza, Tonto Pol no ves las bolsas Estaba de compras *Face Palm*

-Estaba en la tienda- dijo mientras levantaba las bolsas.

Me quede callado, no sabia que hacer, y solo respondí con un *mmmmm*, pensé que la conversación había muerto, pero ella la siguió.

-¿Quieres pasar?

¿Qué?, ¿me invito a pasar a su casa?, Ok Pol no hagas nada estúpido.

-Lo siento en un rato saldré con unos amigos - ¿Qué amigos?

-Esta bien – dijo con una cara de decepción.

Era el momento de arriesgarme, Así es, iba a pedirle su número.

Me puse la mano derecha en el pelo.-¿Disculpa, me darías tu numero? – Pol no la cagues, Pol no la cagues.

-Está bien, ¿por qué no? – Dijo mientras encogía sus hombros. Si!, Por fin lo conseguí, tengo el numero de una chica.

Después de darme su numero nos despedimos, Fue la despedida mas incomoda del mundo, Debido a que no se socializar simplemente levante mi mano y le dije * Adiós * mientras observaba sus ojos.

Mientras iba camino a casa en mi cabeza se escuchaba. Pol estúpido, ¿porque te despediste así?, Ahora seguro piensa que eres raro, no te querrá hablar más nunca.

Al abrir la puerta para entrar a mi casa voltee a ver si seguía ahí, pero ya se había ido. Al entrar a mi casa mi familia estaba apuntó de almorzar. Pausa, Pausa, Pausa.

Aún no los eh presentado. Mi papa es Pol, es inteligente y exitoso, un gran modelo a seguir. Mi mama es Arianna, es una persona sentimental y cariñosa, la mama que casi todos quieren. Tengo 1 hermano y 2 hermanas, la mayor es Ellie, tiene 23 Años, Cree en el amor, pero por eso pero tiene muy poca objetividad. Mi hermano Joseph, tiene 19 Años, es extrovertido y esta obsesionado con los autos, pero desde mi punto de vista es un patán. Y finalmente esta mi hermana menor Perséfone (Si, como la diosa griega) , tiene 13 Años, Es alguien Optimista, centrada en lo que quiere y amigable. Ok ¿Dónde estaba?... Ah ya.

Mi familia estaba a punto de almorzar, entre y los salude como de costumbre.

-Hola papá. – Todos me observaron con una expresión confundida.

-¿En dónde estaba? – Pregunto con una cara de confusión, porque yo nunca salgo.

-Estaba dando una vuelta para estirar las piernas – dije eso para que no me preguntaran nada al respecto de la chica

-Mentira, estaba en casa de su novia – Dijo mi hermana menor con una expresión de maldad.

-No somos novios – Respondí rápidamente. – Solo estábamos charlando

-¿Con quién estabas? – preguntó mi mama.

-Con Eleonor

-¿Eleonor? – pregunto mi mama con una expresión de confusión – Oww, recuerdo cuando estaban en el jardín de niños y eran mejores amigos, ¿Son novios? – dijo mi madre con cara de felicidad.

-No mamá, no somos novios. – dije apenado.

-Tranquilo Pol, no pasa nada si son novios – Dijo mi hermano mayor.

-Mejor dicho, seria una buena noticia que al fin tengas novia – dijo mi hermana mayor complementando a mi hermano.

-¿Pueden dejarme comer?.

Después de terminar el almuerzo fui a mi habitación, como es de costumbre, pensando en nuestra pequeña charla de 3 minutos, y analizando su lenguaje corporal.

Pasaron varios meses desde esa charla, y cambiaron muchas cosas, Ya las charlas no eran de 3 minutos sino de 3 horas, nos acercamos mucho, ella confiaba en mi y yo confiaba en ella, nos contábamos todo, ya éramos mejores amigos. Pero, ¿me quedare estancado ahí como le pasa a todos los chicos como yo?.