El Demonio De La Media Noche.

Capítulo 3: Setsuna Tokage

Aquel suceso ocurrido en el departamento de la única hija de los shield que conmociono a las personas creyéndoles de que ya no estaban a salvo, después de lo ocurrido aquella media noche, cambiaria para bien algunas de las cosas.

-Tamaki-kun gracias- diría sin más la castaña sosteniendo su helado en una de sus manos libres.

- no hay de que uraraka-san- expreso sonrojado de las mejillas, caminando al lado de ella.

- ¿Cómo te fue hoy en clases tamaki-kun?- pregunto desviando la mirada a un lado, distrayéndose un poco con el hermoso paisaje.

- b-bien uraraka-san, nos dejaron un poco de tarea, pero con la residencia y lo que paso la semana pasada tengo muy poco tiempo para hacer todo- diría sin mayor dificultad, con un poco de confianza estando con ella.

- ohoh valla, si debe de ser muy cansado ya que todo el día estas ocupado, pero anímate tamaki-kun pronto terminaras. - diría de nuevo seguido de que volteo a verlo.

- gra-gracias uraraka-san, bueno al me-menos ya e-estas en casa bien- soltó una leve sonrisa en sus labios, remarcando de nuevo aquel sonrojo en sus mejillas.

- no hay de qué y gracias nos vemos mañana- diría sin más para entrar a su casa sosteniendo su mochila y desde su ventana verlo irse.

-hasta mañana uraraka-san- diría nuevamente retomando el rumbo hasta su casa, se adentró en ella, para llegar hasta su alcoba donde saco una pequeña libreta haciendo unos breves apuntes en una pequeña libreta colocando el nombre de uraraka al principio, con aspecto de seriedad en su rostro.

Hasta que la vibración de su celular que dejo en la mesa de su cuarto lo saco de sus pensamientos para su fortuna su mejor amigo mirio le escribió aquel mensaje, tomo su celular con una de sus manos libres después de haber bajado aquella pluma.

-Tamaki-kun ¿tienes el papeleo pendiente? -

-sí, ¿Dónde te lo entrego mirio-kun? –

-muy bien, nos vemos a las 9:00 pm en el mismo lugar de siempre-

-okey mirio-kun-

Aquella pequeña charla entre hombres finalizo as, seguido de que la luz del sol comenzaba meterse detrás de las montañas viendo así como un día más se va dejando ver aquel naranja quemado en las nubes, que poco a poco hace cambiar el color hasta ponerlo color negro dejando ver puntos blancos brillantes en el firmamento nocturno de la noche.

-Ya denki debes de ser fuerte- diría un pelirojo preocupado por aquel rubio quien seguía en su cama acostado.

- no puedo amigo, recibir aquella noticia en la mañana hace una semana me dejo mal, ¿sabes cuánto la amaba?- cuestiono al final con aquella pregunto.

- ohoh eso es sumamente triste mi estimado- soltó zero mientras sostenía un vaso de agua.

- maldita sea pelos de mierda, déjalo ya esta demasiado lamentable ahora este bastardo...- diría sin mientras sigue cruzado de brazos en la habitación del chico rubio con cara de pocos amigos.

-mmm está bien denkibro no te enojes, nosotros estamos aquí para animarte- diría colocándose al lado de él.

- yo estoy aquí a la fuerza pelos de mierda- soltó en forma de reclamo aquel rubio de nuevo.

- no puedo decirte con exactitud por que el amor es algo que no se puede medir, se siente y está presente eso se puede ver, pero tienes que dejarla ir, tienes que salir adelante denkibro ella siempre va a estar presente en tu corazón. - decía con mucho tacto y sentimiento en cada una de sus palabras aquel chico kirishima quien solo quería lo mejor para su amigo.