SLEEPING BUNNY

CAPÍTULO 1

Todo comenzó con una letra.  Todo comenzó con la carta que había enviado en broma.

La carta yacía sobre la mesa de la cocina.  En la superficie, un guión desconocido claramente escrito, "Satomi Kouichi-sama".  Kouichi volteó el sobre, un pedazo de pan sobrante del desayuno de la mañana colgando de su boca.  No pudo encontrar el nombre del remitente.  Pensando que era un DM (Correo Directo) sospechoso, descuidadamente abrió la carta.

<Saludos

<Perdóname.  Gracias por su carta.  >

Kouichi ladeó la cabeza con curiosidad.  Durante los últimos años, no había escrito nada más que saludos de temporada y cartas de recuperación.

<Me gustaría conocerte.  >

No podía apartar los ojos.  Era como si su mirada estuviera clavada en el lugar.  Confundido, corrió a su habitación en el segundo piso, agarrando con fuerza la carta en sus manos.

"Deja de correr en la casa; ¡es ruidoso!"

La voz enojada de su madre, que era más fuerte que sus pisotones, sonó en toda la casa.  Cerró la puerta de su habitación y abrió la carta, con las puntas de los dedos temblando.

<Te espero esta semana el domingo a las 2 PM en la cafetería "Marlene", ubicada en el segundo piso del edificio Haruka, al lado de la calle principal de la estación Kase.  >

Las comisuras de sus labios se aflojaron y su rostro se volvió rojo brillante.  Estaba enfermo y cansado de escuchar sobre otros tipos que recibieron "cartas de amor", pero el propio Kouichi nunca recibió una confesión de amor, y mucho menos una carta de amor, a pesar de que ya era un estudiante de segundo año de secundaria.

Esta fue la primera vez en su vida.  Leyó hasta la última línea (mientras tanto, la mente de Kouichi pasó rápidamente por las caras de todas las chicas que había conocido hasta ahora, concentrándose en las lindas) y luego pensó que algo estaba mal con sus ojos.

<Itou Hirokazu>

No importa cuántas veces lo miró, no cambió de "Itou Hirokazu".  Hubo un pequeño problema... en realidad, un gran problema con el nombre de una niña.

Comenzó a leer la carta de nuevo.

<Me gustas.  Me gustaría conocerte.  >

Allí se escribieron palabras que lo hicieron feliz al borde de las lágrimas.

Pero es Itou Hirokazu.

"Oye, eso ni siquiera es gracioso...

Su orgullo masculino que se había hinchado se hundió en el suelo en cuestión de segundos.  Por supuesto, se conocía mejor que nadie. Tenía casi 180 centímetros y su rostro estaba bien, pero de alguna manera a las chicas realmente no les gustaba.  Puede ser debido a su personalidad relajada.  No era popular en absoluto.

"Algo es diferente sobre Satomi. Como, él no empuja a una chica al límite... Es aburrido".

Las chicas parecían pensar que los corazones de los hombres están hechos de acero.  El comentario arrojado descuidadamente hirió los sentimientos de Kouichi profundamente.

Gracias a la carta, le recordó sus defectos.  Estaba más allá de enojarse.  Fue en un momento en que se deprimió, por lo que arrugó la carta con dureza.
* *

El sol se pone rápidamente en invierno.  Después de la escuela, mientras su maestro de aula Iwamoto le daba una conferencia, los alrededores se volvieron completamente oscuros.  Kouichi regresó a su salón de clases para recuperar su abrigo y su mochila.  Al ver el frío salón de clases desprovisto de todos los demás estudiantes, suspiró profundamente.