capitulo 3: ¿otra vez juntas?

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Bonnibel se quedo congelada y con una expresión de sorpresa plasmada en su rostro era evidente que esto la había agarrado por sorpresa.

-lo ciento anillo pero debo irme-anillo solo pudo quedarse ahí viendo como bonnibel se alejaba.

- Hey espera- trato de detenerla pero no logro alcanzarla. - pero que le ah pasado- se pregunta anillo en su mente.

Bonnibel salió al patio necesitaba aire, buscó un lugar tranquilo donde pudiera estar sin que la molestaran, para poderse calmar.

*-¿Por que?... ella no debería de estar aquí-* Se cubre el rostro con las manos y comienza a llorar. -.marce... lo siento-.

Mientras tanto en la cafetería de la prisión marceline buscaba un lugar en donde sentarse en eso ve que salvaje le hace una señal para que se siente junto a ella, marceline solo suspira y se acerca para sentarse.

-¿hola marce...como estas?- lo dice con tono coqueto.

-he hola salvaje, bien solo otro día en este lugar de mierda. No podría estar mejor- lo dice con ironía.

-Wow se nota que estas de animo – se lleva una cucharada de comida a la boca, en ese momento llego grumosa y se sentó enfrente de las chicas.

-¡hoola chiicass!

Marceline no contesta al saludo de grumosa era obvio que algo le molestaba, salvaje por su parte le devolvió el saludo a grumosa pero esta al voltear a ver a marce noto su incomodidad y se limito a solo hablar ella con grumosa que por lo visto traía algo bueno que contar.

-¡Adivinen que paso hoy en mi celda!- marceline solo la miraba con aburrimiento mientras que salvaje la miraba con intriga.

-¿!no me digas que les volviste a hacer una broma pesada a tus compañeras de celda!?, por que si es eso no vengas a pedirnos ayuda de nuevo ok!!!. Quedo claro ¡grumosa! Dijo salvaje mientras se cruzaba de brazos mostrando algo de enojo y seriedad en su mirada.- aun recuerdo que la última vez por tu culpa nos dejaron sin comer una semana a las tres, y todo por hacerle esa broma tan pesada a desayuno.-salvaje se muestra bastante enojada por el recuerdo de esa vez.

-¡no es eso! Aun que pensándolo mejor podría hacer lo de...-

-¡grumosa!- salvaje no dejo que grumosa terminara de decir su plan ya que esta le llamo la atención y la estaba viendo con una mirada de "no te atrevas a hacer alguna tontería o te mato". Al sentir la mirada solo se limito a tragar saliva del miedo que esa mirada le producía.

Marceline solo se mantenía al margen de la conversación mientras en su mente trataba de atar los cabos sueltos que tenia en cuanto aun pequeño pensamiento, tal pensamiento que se produjo en su mente después de a ver escuchado la radio hace unos días. Ese pensamiento la había estado abrumando y eso ya le estaba hartando.

-Esta bien esta bien salvaje, cálmate no are nada malo. Es mas eso no era lo que les venia a contarles – lo dice con algo de nervios pues la mirada de salvaje si la había hecho temblar un poco.

-bueno entonces si no era eso lo que no venias a contar, ¿que es?- pregunto con cierta curiosidad, mientras comía una cucharada de su comida.

-¿recuerdan que hoy llegaron cuatro recruzas nuevas?-

-si,¿ pero que tienen de especial eso?, siempre llegan reclusas nuevas no se que tienen de especial ¿acaso son famosas o algo así?- salvaje pregunto algo confundida

En realidad no tienen nada de especial solo que, ¿adivinen quien conoció a una de las nuevas?

-ya grumosa ve al grano y deja de darle tantas vueltas al asunto- salvaje se estaba comenzando a enojar

-Ya ya que genio... ya cásate- lo último lo dijo en un susurro para que no la oyera su amiga. –bueno lo que pasa es que una de esas hermosuras fue asignada a mi celda. Eh de admitir que se ve algo inocente y eso es lo que me gusta de ella, sin mencionar el dulce aroma que despide- lo dice con un poco de lujuria en su voz, marceline en ese momento presto mas atención a la conversación que tenían sus amigas pues esa descripción le sonaba bastante familiar.

-*No... no puede ser ella debe de ser mera coincidencia*- esto era lo que marceline se decía en su mente

- En cerio, wow quien lo diría asta las perras como tu tienen suerte con tener chicas bonitas cerca esperemos y no la asustes con tus malos modales- salvaje le hacia burla a su amiga. –Bueno pero dinos ¿cual de las cuatro es tu pobre victima?-

-¡Oye!...bueno es la de cabello rosado, piel blanca cual porcelana, ojos verdes que enamoran con solo verlos, y es de estatura media alta- grumosa dio toda la descripción como si fuera una joven enamorada.

-ah ¿es la que parecía cachorro asustado cuando entro con los guardias?-

-Si efectivamente es ella la que será mi próxima conquista- en su rostro se ve una sonrisa de orgullo al hacer tal comentario.

Marceline solo se mantenía escuchando atentamente con una expresión seria en su rostro. Pero al escuchar la descripción de la chica su expresión cambio a una de asombro y terror, pues era muchas las coincidencias.

-Gru...grumosa, ¿de casualidad sabes el nombre de esa chica?-por fin marceline se opto por hablar con algo de nerviosismo en su voz aun que luego lo disimulo muy bien, para que no se dieran cuenta de lo interesada que estaba por saber esa información. Mientras esperaba la respuesta de grumosa recargo sus brazos sobre la mesa haciendo aun lado su bandeja de comida.

-Si, me parece que se llama bonnibel bubblegum, o al menos así se presento con anillo a lo que alcance a escuchar cuando llego- lo dijo algo pensativa – Marceline ni se te ocurra acércatele ella es ¡mía!, me ¿pregunto por que estará aquí? Con esa carita de ángel que tiene parece que no rompe ni un plato con esa carita.

-al parece que alguien esta enamorada- salvaje le hace burla a su amiga sonríe con burla.

Marceline en cuanto escucho el nombre completo de la chica miles de recuerdos aparecieron en su mente. Ella solo se levanta y se dirige a la salida de la cafetería al llegar al pasillo se le comienza a nublar la vista y se recarga en la pared para poder recuperarse pues se sentía muy mal, por suerte Fiona la vio y fue a auxiliarla justo cuando se desmallo. Fiona reporto lo sucedido y llevo a marceline a la enfermería.

En la enfermería un par de horas después marceline despertó y se dio cuenta que estaba en la enfermería no sabia la causa pues no podía recordar nada, que no fueran los sucesos de su pasado con bonnibel, en ese momento solo se cubrió la cara con sus manos y comenzó a sollozar.

-¿por que?... ¿Por qué tenias que ser tu?, ¿porque ahora?,¿ por que me sigues haciendodaño?, ¿por que Bonnie?

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bueno asta qui el capitulo de hoy espero les gusten voten y comenten asta la próxima 

Dulce condenaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora