᯽ೃ •ᴘɪᴄᴋ ᴀ ꜰʟᴏᴡᴇʀ | DHMIS

🌻Flores Para Ti🌻

Un pequeño niño deambulaba por los pasillos de su casa en busca de diversión ya que se había aburrido de su televisión.

Mientras hacía su recorrido, pasó por una habitación en donde su puerta estaba levemente abierta. Se asomó y vio a su padre sentado y al parecer dormido frente del computador.

Pensó en sorprenderlo, quizás en una de esas quisiera jugar con él un rato. Entró sigilosamente a la habitación hacia la silla donde estaba su padre. Cuando estuvo frente a el, dio un pequeño salto y abrazó al mayor.

-¡BOO!- Gritó el infante haciendo que el mayor peque un mini saltito y rápidamente cierre las pestañas que tenia abiertas en el PC.

Se giró y miró a su hijo el cual tenia una sonrisa en su rostro.

-Argh, Manny, ¿Qué haces aquí?- Gruñó -Te dije que te quedaras en la sala.-

-Ya lo sé, pero me aburrí- Hizo un puchero, separándose de su padre -Y... ¡Vine a ver si querías jugar conmigo!- Dijo emocionado -

-¿¡Eh?! ¿¡Sólo para eso?!- Dijo, molesto - ¡Te dije que cuando trabajo no me molestes!- Alzó la voz levemente haciendo que el menor se sobresalte un poco -

El mayor al ver la cara triste del pequeño, suspiró, mirando hacia el lado contrario rascando su nuca.

-Está bien... Pero luego- Dijo y al contrario se le iluminó el rostro -Probablemente-

-¡Sí!- Dijo saltando de la emoción y dándose vuelta para salir de aquella habitación. -

Pensó lo que podía hacer para distraerse, y se le ocurrió la idea de ir al patio. Ya decidido, caminó hacia la puerta que daba al exterior.

Cabe aclarar que su casa estaba en medio del bosque, donde había muchas plantas bonitas junto con varios arboles de grande estatura.

Ya estando fuera la casa miro a su alrededor y suspiró. Le encantaba la vista que tenía. Miró hacia adelante y vio una pequeña ardilla. Con una sonrisa, comenzó a perseguirla. El pequeño animal, al ver que el niño venía hacia el se asustó e intentó escaparse.

Así pasó unos minutos. Manny reía persiguiendo a la ardilla mientras ésta de cualquier manera intentaba desaparecer de la mirada del niño.

A lo lejos notó algo. Paró su paso y volteó a ver lo que antes había jurado ver, encontrándose con un sendero de flores. Habían de distintos tipos; margaritas, girasoles, otras que no sabía pero eran muy lindas, etc. Todas se veían como un arcoíris terrestre, muy hermosas a la vista del niño.

Pensó unos segundos y se le vino una maravillosa idea a la mente.

"¿Y si le llevo unas flores a mi papá?"

Su mente aprobó el pensamiento y, sonriente, se dirigió hacia aquel arcoíris hecho de flores. La ardilla aprovechando la situación, corrió y desapareció por el bosque.

Ya en el lugar, se detuvo unos momentos a pensar. Se le hacía imposible elegir una, ya que todas le parecían bonitas.

Finalmente se decidió por unas. Éstas eran pequeñas y amarillas.

"Son perfectas" Se dijo a sí mismo.

Se inclinó un poco, las recogió y fue a su casa de vuelta con la planta en manos. Con saltitos se dirigió hacia el cuarto donde anteriormente había visto a su padre. Miró por el orificio de la llave y, efectivamente, seguía allí.

Abrió la puerta sin dudar, lo que hizo que el mayor se sobresaltara y cerrara de nuevo las páginas.

-¡Mira papá! Son flores, flores para ti- Sonrió acercando la flor hacia él.

El mayor lo miró molesto.

-¿¡Vienes a molestarme sólo por eso?!- Dijo aún más molesto -TE DIJE QUE NO TE QUIERO AQUI -su tono de vos asusto al menor, el mayor tomo las pequñas flores y las rompió- FUERA MANNY - lo empujo y este choco con una pared haciendo que algunas cosas que se encontraban en la repisa caigan entre esas un foto de una mujer de piel palida, ojos negros y cabello castaño claro, al caerse obviamente se rompio el mayor al ver la foto rota se enfureció- ESTUPIDO NIÑO, VETE DE CASA

-Pero.. -tartamudeo por el miedo

-TE DI UNA ORDEN -levanto su puño y lo golpeo en el rostro dejandole su ojito derecho morado

El niño empezo a lagrimear y corrio hasta la salida de la casa y fue al sendero de flores estando ahi corrió por este por sus mejillas palidas con toque carmesi caian lagrimas se esperaba cualquier tipo de reacion de parte de su padre pero menos esa

Dejo de correr ya se habia alejado lo suficiente se sento en el cetped y oculto su carita entre sus rodillas, no sabia que hacer lo habian corrido de su casa y no tenia a nadie mas que cuide de el simplemente lloro, pero levanto la mirada al sentir algo en sus pies ahi se encontraba la misma ardilla de hoy el infante sonrio y le acarició la cabeza

-Hola pequeña ¿te perdiste? -la tomo entre sus brazos para poder acariciarla mejor- ¿quieres que te ayude encontrar tu hogar? -obiamente nadie contesto pero para el niño fue un si- pues ¡Vamos! -se levanto del lugar y camino con el animal en manos

Mientras caminaba recogió algunas flores de diferentes colores pero mas de verde el cual es su favorito, no se dio cuenta pero llego a una casa no muy grande enfrente de esta habia un arbol el pequño lo trepo y dejo al animal ahi iba a bajarse pero estaba algo cansado de caminar asique se quedo en la misma rama donde dejo a la ardilla

Cuando estaba apunto de dormirse escucho unas voses y una puerta abriendose, se sobresaltó provocando ruido, las voses estaban mas cerca estaba asustado no sabia que le podian hacer despues de todo nunca salio tan lejos se su casa, iba a llorar otra vez hasta que sintio unos brazos que lo bajavan de aquel sitio, ya en el suelo vio a dos personas Un hombre alto de cabello rojo con ropa del mismo, y el otro peliverde de un pocoquito mas pequeño que el otro en estatura este traia ropa de color cafe, los dos miraron al menor y le sonrieron

-Hola pequeño -dijo el pelirojo- ¿que haces aqui? y ¿Donde estan tus padres?

No respondio tenia miedo todabia

-Vamos no tengas miedo nosotros no te haremos daño -le dijo el peliverde

El niño solo negó con la cabeza y con algo de miedo hablo

-Mi papa me corrio de casa -bajo la mirada

-Oh ¿porque lo hiso? -pregunto el peliverde

-No lo se, todabia no le entiendo

-¿que te paso en el ojo?

No respondio

-¿Y no tienes a alguien mas? -volvio a hablar el pelirojo

El niño nego con la cabeza, y los dos mayores se miraron un rato

-Puedes venir con nosotros -le propuso el peliverde

El menor levanto la mirada, los dos adultos le sonreian este se sintio feliz por mas que eran desconocidos fueron muy amables con el y no parecían personas malvadas y asintio tomo su flores caminaron dentro de la casa

Ya dentro el pequeño los miro y mostro un ramo de flores

-Flores para ustedes -sonrio- Eligan una flor

Sonrieron el pequeño la pasaria genial con ellos