Crónicas de una invasión

El último hombre del mundo

 Recuerdo el día que la raza humana desapareció. Me desperté, prendí la tele. Todos los canales estaban con la puta lluvia gris que te ensordece, esa que siempre te sorprende con el volumen alto. Podría haber sido un fallo de la antena así que me levanté, agarré la escalera y me subí al techo. Desde ahí me detuve a observar la casa de los vecinos, algunas tenían los vidrios rotos, había autos desparramados en medio de la calle con los capos echando humo como si fuesen chimeneas. Me olvidé de la antena y bajé por mi esposa y mi hija.

-!!María!!- Nadie respondió

-!!Susan!!- Tampoco

Me preocupé, así que ....... AH! A todo esto, yo era ( bueno, quizás lo sigo siendo, ha pasado mucho tiempo) padre de familia en mi anterior vida. Lo llamo así porque hace 20 años que ocurrió esto , digo " esto" porque ni siquiera se que pasó. Hace 20 años que no veo a mi mujer ni a mi niña, hace 20 años que no veo a mis amigos, hace 20 años que no me hacen una caricia, que no me dan un beso, que no tengo sexo, que no cocino para una velada romántica, que no envió un mensaje, que no recibo ninguno tampoco. HACE 20 AÑOS QUE NO HABLO CON OTRO SER HUMANO. Al principio fue traumático pero lo aprendí a sobrellevar encontrándole sus beneficios. Cuando empezó a escasear la comida me mude al lado,a la casa de los Patersson. Hurgué todas sus alacenas, me probé sus perfumes, su ropa para ver como me quedaban. Luego me pasé a la siguiente, luego a la siguiente y así hasta completar toda la manzana.

Yo nunca había disparado un arma pero cuando entre en la comisaria me lleve 2 calibre 45. y una escopeta, no tenía a quien tirarle pero por si acaso. Desayuné en todos los Starbucks y comí en todos los McDonalds de la cuidad. Además con un plus porque conocí sus cocinas, cosa que en el mundo normal de antes no hacía un cliente habitual. Ojo!. también me he dado el lujo de comer en restaurantes caros y cocinarme cortes de carne de primera calidad. Otro día visite el cine de la ciudad, me tuve que dar manía para entender el mecanismo de la máquina y reproducir los rollos por eso a principio practiqué con películas que no me interesaban. En la filmoteca estaban todas las producciones que se fueron estrenando y quedaron ahí como " La ventana indiscreta" " El cuervo" " El resplandor" y " Marcianos al ataque", quizás esa se había vuelto realidad y yo nunca me enteré jaja. Hice palomitas de maíz y me senté a ver " El señor de los anillos" por duodecima vez, era mi película preferida.Visitaba bibliotecas, me quedaba algunos libros, los leía y cuando encontraba otra los cambiaba. Era la mejor forma de matar el aburrimiento, he llegado a leer un libro por día.

Cuando Estados Unidos me quedó chico me propuse a viajar por el continente. Probé los burritos de México, visite las ruinas Aztecas, Mayas y también estuve en el Nachu Pichiut, o algó así , todavía no me sale bien como se pronuncia. Luego de tantos años y de dejarme crecer la barba he llegado al sur del continente , me aproximo a un cartel que dicé " BIENVENIDOS A LA REPÚBLICA ARGENTINA"