Pensamientos Libres

Déjalo ser, déjalo fluir...

En la vida hay más de un momento que nos deja paralizados, ya sea de felicidad o tristeza. Estos momentos están destinados a hacer grandes e importantes cambios en nosotros, incluso llegan a cambiar nuestra perspectiva sobre algunos temas o acontecimientos, y más aún sobre nuestra forma de ver la vida, e incluso, de vernos a nosotros mismos.

Si somos conscientes de que no podemos hacer nada para evitar que estos momentos se den, y que evitarlos sería una locura porque entonces no seríamos nada; si llegásemos a aceptar que hay cosas que cambian y nunca vuelven a ser como antes; entonces, y solo entonces, estaríamos viviendo realmente.

En algunas ocasiones debemos dejar que la vida fluya a su ritmo. Sé que algunas circunstancias nos hacen sentir miserables o que no merecemos nada, incluso podemos llegar a sentir en nuestra propia piel que debíamos estar en lugar de otra persona porque los palos que ha recibido serían menos dolorosos de haberlos recibido nosotros, pero debemos aprender a aceptar y dejar que todo fluya y sea de la forma en que debe ser y listo. Pues todo lo que acontece en la vida, lo hace por motivos que solo ella conoce, y ¿quiénes somos nosotros para frenar o tratar de impedir eso?

Como mismo debemos aceptar que todo lo que nos sucede nos pasa para crecer ante la vida, debemos también entender que lo que le sucede a los demás es por el mismo motivo. Cuestionar lo que no entendemos solo generará más dudas. No hablo de no buscar respuestas sino de hacerlo de la forma correcta, y no es precisamente queriendo que los acontecimientos desafortunados que hemos vivido se borren ni mucho menos, pues esos son los que nos hacen más fuertes, ¿qué sentido tendría la vida si no existieran los obstáculos?
Aprendamos a levantarnos y mirar hacia adelante. Y les hablo desde el punto de vista de alguien que ha tropezado mucho y ha estado en el suelo infinitas veces, pero que ha sabido aceptar, perdonar, levantarse y continuar.

A la vida hay que dejarla ser, dejarla fluir. A lo mejor aceptando eso lograremos mejores cambios, y con estos, mejores resultados. Los eventos tristes y dolorosos seguirán ahí, no hablo de que desaparecerán y la vida será color rosa, sino de que estaremos mejor preparados para hacerle frente, si aprendemos a aceptar que la vida es como es y la única opción que tenemos es vivirla.

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