Padres Temporales

Rechazo

—¡Jungkook!... — el pelinegro iba demasiado rápido escaleras abajo, realmente no se iba a detener, para el moreno era imposible alcanzarlo, así que optó por soltar algo que realmente le pusiera interesar —¡También me gustas! — y entonces el chico se detuvo, mirando hacia arriba, por el barandal de las escaleras, teniendo sus ojos aún más abiertos, totalmente congelado, el moreno bajó enseguida hasta quedar frente a él, sólo con unos escalones de distancia —Claro, me pasó como a todos... — bajó un escalón —Me dí cuenta ese día que Hobi hyung te ayudó con tu cambio de imagen...— otro escalón —Pero desde mucho antes en el fondo yo ya sabía que te quería...— otro escalón, cuando sólo faltaba uno para estar cerca el fornido retrocedió uno, dejando más distancia.

—No hables así de mí... Tu... Tu sólo te fijaste en mi nuevo rostro, ya no soy el niño que ustilizaba anteojos, pero no es diferente porque los cambié por lentillas/lentes de contacto, ya no tengo brackets de colores... No hay diferencia en verdad, ahora son transparentes...— el mayor se acercó un escalón y el bajó otro poniendo distancia —Ahora mis camisetas son negras y se ajustan a mi cuerpo, mis pantalones resaltan el trabajo de mi. cuerpo, pero realmente no te has dado el lujo de conocerme realmente...— otro escalón entre ambos y ahí terminó la primer serie de escalinatas —Me gustas, Kim Tae Hyung, pero no soy estúpido, un par de palabras lindas no me harán caer a tus pies — enseguida el chico volvió a su camino, terminando con el resto de las escaleras y dejando a Taehyung con lo que tuviera que decir, tragándose de vuelta sus palabras cursis probablemente mal gastadas, entonces el pelinegro corrió por todo el campus, intentando tirar estrés de su mente y cuerpo, tratando de evitar toda esa mala situación allá atrás, dejando salir su molestia y tristeza por las gotas de sudor.

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—Buenos días, hyu-... Taehyung hyung, hola — un tono de voz amable se volvió a uno seco en cuanto el pelinegro vió dentro de la sala al chico , una reverencia de cuarenta y cinco grados dió a denotar su molestia y no hizo más que meter sus cosas a su casillero/taquilla, ignorando enseguida la presencia de el mayor, hasta que cerró la puerta y vió a el moreno sosteniendo un café de vainilla frente a su cara, con la cabeza baja.

—Por favor, discúlpame si te ofendí, Jungkook-ssi.

El menor soltó un suspiro con pesadez, aceptó el café dando un gracias en tono bajo, suficientemente audible para el mayor, entonces palmeó su hombro y bebió del vaso para relamer sus labios —No hacía falta que me regalaras mi propio café, Taehyung hyung.

El tono bronceado en la piel de el mayor desapareció, dejándolo con una sonrisa nerviosa, rascó su nuca riendo sin salida de la incómoda situación —Ah... Si, creí que sería cómico de cierto modo, je je.

—Bueno, quita la comedia de tu lista de profesiones futuras.

—Eh... Si, lo haré...— silencie~ —Escha YO-

—¡Lamentamos llegar tarde, YoonJi y YoonGi no se querían despegar de la cama! — entró el moreno de baja estatura con rapidez, llendo hacia su casillero/taquilla, siendo seguido por un despreocupado Min, entrando a paso tortuga aún con cara de gato con sueño.

—Hyung, está bien, no siempre tienes que venir tan temprano.

—Tenemos que organizar el festival de Verano, ¿recuerdas? Pronto serán las vacaciones y tenemos licencia para hacer el festival, lo cual quiere decir que esta semana no tendremos clases por y para organizarlo, entonces si, Kookie, tengo que venir, TODOS los del consejo tenemos que venir temprano.