#Jeff
¿Qué es esto? ¿Dónde estoy? ¿Qué hago aquí?- Eran las preguntas que me hacía ahí, hasta que una ente, con la forma de Dawn, lo sé porque no tenía su voz. Se me acercó. El sitio estaba muy oscuro, la verdad me gustaba ese ambiente. Cuando se me acercó vi como se esbozaba una sonrisa en su rostro.
- Nos volvemos a encontrar.
- ¿Se puede saber que dices? – Dije muy extrañado
- ¿No me recuerdas?
- ¿Estoy entre la vida y la muerte otra vez?
- Si, has acertado de pleno. Pero hay algo diferente.
- ¿El que es diferente?
- Si quieres vivir ahora pagaras un precio.
- ¿El qué?
- Estarás a varios kilómetros de Dawn, tú solo deberás ir a buscarla
- ¿Y si elijo morir?
- No puedo decírtelo.- Dijo ella o él, más bien, eso, muy serio, demasiado
- ¡Elijo vivir! ¡Quiero ver a Dawn!- Eso rió, no era una risa muy dulce. Pero si quería salir de ese puto lugar, debía no decir nada.
- Si tú lo deseas… - Yo no dije nada. Me desperté en un hospital con una venda en la cara, odio esas cosas. No oía ni veía nada, era un maldito suplicio. ¿Quién sabe quién me querrá atacar en ese mismo instante? Y van y me quitan el sentido de la vista y el oído. ¡De puta madre! Con estos pensamientos me levanté y me quité los cables del suero. Fui al baño a mirarme.
- ¿¡Pero qué?! – vi que tenía un aspecto de venti-y-tres años. Me alarmé- ¡Soy viejo! ¿¡Cuanto tiempo ha pasado?! ¿¡Donde estoy!?- vi pasar a un enfermero en ese mismo instante- ¡Eh, tío! – Dije para prestarle la atención- El me miró extrañado, vino hacía mí y se me puso cerca de mí.
- Hola, Jeff Woods, asesino de mi familia. – Di dos pasos atrás, creyendo que buscaba venganza. No había nadie más, estaba débil. Hubiese sido la ocasión perfecta. El me cogió del hombro- Tranquilo, sonrisitas, no te va a pasar nada. Solo que… -Susurró algo, yo me acerqué, y.. ¡Pum! Me dio un puñetazo en el estómago. Yo solo me encerré en el baño, afortunadamente, ahí estaba mi ropa. Me vestí y salí corriendo. Las preguntas se amontonaban en mi cabeza de asesino, algo normal. “¿Dónde está ella?”, “¿En qué hospital?” Fui hasta un mapa de la ciudad, el hospital más cercano estaba a varias manzanas de allí. Si cogía el autobús, me reconocerían y yo no me podría defender, así que decidí ir a pie, ya que era una ciudad casi vacía, no sabía porque, ni me importaba. Lo único que quería era responder esas preguntas que rondaban por mi cabeza.
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