¿ "𝙨𝙚𝙚 𝙢𝙚" ? : 𝙔𝙊𝙊𝙉𝙈𝙄𝙉

𝗰𝗮𝗽𝗶́𝘁𝘂𝗹𝗼 𝗱𝗼𝘀 : 10

Los rayos del sol entraron por la ventana chocando con el calmado rostro del chico rubio el cual al sentir aquella luz molesta no dudo en abrir sus ojos, frunciendo levemente su nariz por el malestar y pequeño mareo, se sentó en la cama mirando toda su habitación, se sentía extraño por alguna razón. Se levantó dispuesto a prepararse para su primer día de escuela pero algo lo detuvo, encima de su mesita de noche se encontraba una rosa de pétalos azules y leves tonos anaranjados en las puntas, tomo esta con suma delicadeza mirándola, no pudo evitar recordar aquel raro sueño que tuvo.

"- Prometeme que cuando despierte te volveré a ver, que estarás al lado mío sonriendo como siempre...

- Prometo estar aquí... "

Nuevamente un mareo se hizo presente por lo que cerró sus ojos y apoyo de la pared, aquel sueño se había sentido tan... real, aún podía sentir las emociones provocadas por la mirada gatuna de aquel hermoso chico de tez pálida.

- Solo fue un sueño...

Buscó con la mirada algún jarro donde dejar la rosa para que esta no se marchitara, al encontrarlo este tenía ya algunas flores de colores anaranjados, dejo la rosa junto a las demás, cuando volviera a casa se preocuparía más por esta y su cuidado.

- Te lo juro Taehyung, fue el sueño más raro que he tenido en mi vida, todo se sintió tan.... tan real.

- Talvez no debí llevarte a esa fiesta anoche, te dejo mal amigo.

Ambos chicos se encontraban en la cafetería de la escuela comiendo sus desayunos, el rubio al ver a su amigo no había dudado ni un segundo en llevarlo a su "mesa especial" y contarle de aquel raro sueño.

- Aún así... tengo el vago recuerdo de que aquel chico dejó una rosa sobre mis manos, y al despertar, la rosa estaba en mi mesita de noche pero tenía un color diferente.

El rubio se sentía algo extraño, desde la mañana no podía dejar de pensar en todo lo que le había pasado, del sueño, de aquel chico que le hizo sentir emociones desconocidas con tan solo una mirada. Pero pronto tuvo que dejar su ensoñación ya que la alarma de su celular empezó a sonar indicando que la siguiente clase empezaría dentro de unos minutos.

- Joder, mi clase de música.... bien Tae debo irme, nos vemos en el siguiente receso. - empezó a recoger sus cosas con bastante velocidad, su salón quedaba algo lejos de la cafetería por lo que debía irse cuanto antes.

Luego de despedirse de su amigo dejando un beso en su mejilla empezó a correr a su salón, tanto era el apuro que no pudo evitar chocar contra el cuerpo de otra persona haciéndole caer al instante, soltó un jadeo por el dolor en su trasero gracias al impacto, alzando su mirada hacia el causante de que cayera.

- ¿ Estas bien ?

¿ Dos almas rotas se pueden encontrar
después de la muerte ?, si