desde el comienzo

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Como cada lunes se enlistaba para ir hacer eso que tanto detesta que es darles entretención a esos cerdos y los cuales le han acosado por aparentar ser un menor de edad.

Odiaba cuando sus fans se ponían locos y quería acercársele a toda costa para poder pasar unos momentos con el.

Pero no sabían que solamente se dedicaba a bailar en ese horrendo lugar y a nada mas.

Porque el no se vendía como si lo hacían sus amigos NamJoon y JungKook.

Como estaba tan metido en pedir prestamos para costearse su adicción que no le quedo de otra que aceptar lo que le había propuesto su antipático jefe el "Pantera" para asi pagar lo que le debe.

Por lo mismo se da animos mentalmente cuando se ve en el espejo y nota las evidentes ojeras ademas de su piel lechosa que cada día esta mas delgado no importándole lo que le ocurre pues sabe perfectamente es a causa de lo que consume toda las noches.

Cuando ve que su compañero le palmea el hombro es señal de que ahora es su turno de ir a bailar en el tubo.

Entre miradas de todos va hacia el escenario para comenzar lo que mejor sabe hacer que es bailar al compás de la música lenta y así seducir a todos los presentes con su peculiar movimiento de caderas que es tan lento que nota como los cerdos se saborean de solo mirarle bailando en solamente ropa interior femenina.

Al acabar recoge todos los dólares que le han dejado esa gente espantosa que no es poco la verdad para ir a donde se encuentra su jefe y el cual le sonríe tan socarronamente mientras me quita el dinero que tenia entremedio de aquella braga rosa para decirme que le espere en su oficina.

Al asentir veo como mis demás compañeros llevan a unos hombres para las habitaciones privadas dándome arcadas de lo que harán junto a esos viejos malditos.

Entro cubriéndome con mi bata notando el horrible lugar que esta lleno de humo y huele espantosamente mal pero solamente voy para que me de algo nuevo que probar.

–mi diamante en bruto...que alegría de verte...hoy...me has hecho ganar mucho dinero.

Pongo cara de asqueado cuando me observa con ese morbo no imaginándome las barbaridades que debe de esta rondando por su cabeza y por lo mismo me cubro mas para que no siga fantaseando conmigo porque varias veces se me ha insinuado pero siempre le termino rechazando porque no me vendo por nada ni por nadie.

–lo se...esos imbéciles aún creen que tengo quince años... ¿para qué me mandaste a llamar?

Alzo una ceja mientras que me quedo de pie no perdiendo de vista todo lo que el ajeno hace mientras que saca algo de sus cajones y lo deja encima de su escritorio...sabe el maldito que soy débil ante eso que esta ahí pero lo tomo tan rápido que suelta una carcajada al ver mi acción.

–veo que estas ansioso...anda a divertirte ya que me has hecho ganar mucho el día de hoy.

Asiento cuando salgo del cuarto ese para ir rápidamente hacia mi habitación que esta en la segunda planta mientras que miro de reojo a mis demás compañeras como compañeros siendo amables de cierta manera con los clientes pensando en como pueden vender su cuerpo a cambio de unos peso y corro para irme lo mas pronto posible hacia mi lugar.


Al entrar cierro con llave ya que no quiero que nadie note lo desesperado por consumir esta porquería la que tanto me hace olvidar mi martirio.

Hago varias líneas de este polvito que me hace olvidar y las aspiro mientras que toso por lo tosco que he sido esta vez pero me vale verga.

–me gustaría que mi vida fuera normal y no estar metido en esta pocilga de mala muerte.

Exclamo bajito ya bajo los efectos de esta droga por lo que cuando estoy completamente drogado comienzo a gritar maldiciones a quienes me dieron la vida y no evitando autolesionándome como siempre lo hago cuando estoy aburrido de mi vida y como quisiera acabar con ella pero suelo ser tan cobarde que cuando lo he intentado me he arrepentido.

Al perder los efecto luego de varias horas de estar hablando conmigo mismo pues me tiro al piso con lagrimas en mis ojos porque en el único lugar que me permito llorar es en mi habitación estando completamente solo...porque así me siento...

Siento un gran vació y soy dependiente a las drogas como también suelo estar inestable emocionalmente pero nadie nota ello.

Solamente quieren mi lado sensual y a nadie le intereso...solo quieren mi cuerpo para saciar sus perversidades y por lo mismo sigo siendo virgen porque no soy digno de nadie.


Me despierto y me levanto rápidamente del piso por las enormes ganas de vomitar que me dieron mientras que me tropiezo porque siento que mi cuerpo no me responde.

Cuando me despabile me meti a bañar lo mas veloz que pude antes que el jefe me viniera a buscar y como lo hice rápido pues me coloco lo primero que encontré la verdad...pantaloncillos cortos negros junto a una sudadera ploma de manga larga para salir de mi habitación.

Al entrar al comedor veo la cara de horror de todos no entendiendo que ocurre pero al dejar pasar unos minutos pues entra nuestro jefe con uno de nuestros compañeros y el cual estaba llorando notando inmediatamente que a la vez estaba herido.

Ya sabíamos que significaba y entre suplicas del chiquillo sabemos que Hoseok no tiene piedad con nadie le dio una bofetada delante de todos notando la cara de horror de los mas menores.

– te advertí que no te podías escapar...ahora sabrás lo que les pasa a los que me desobedecen.

Se saca el cinturón mientras que me voy preparando para lo que va a pasar a continuación.

Le da varios latigazos con su grueso cinturón y a la vez me cubro los ojos para no seguir viendo aquel horror.

Pero después se detiene los golpes a lo que me quito mis dedos de mi rostro para ver como le ha dejado la espalda al pobre chico.

–perdóneme no lo volveré hacer señor Jung

–eso espero Jeon...porque a la otra no vivirás para contarlo...Min...llevártelo y curale las heridas...si alguien mas pretende desafiarme ya saben lo que les pasara.

Como pude tomo al chico en mis brazos para llevarlo hacia mi habitación...

Siento que es mi culpa por inducirlo en este oscuro mundo en donde soy un angel con las alas rotas gracias a los que me dieron la vida.

Broken WingsDonde viven las historias. Descúbrelo ahora